Con el inicio este martes de la Cumbre de los Pueblos, un evento alternativo a la VIII Cumbre de las Américas, Lima se convierte en la capital latinoamericana y caribeña de los movimientos sociales, partidos progresistas y jóvenes comprometidos con la unidad, el antimperialismo y los principios de justicia e igualdad para la región.
El evento, que se extenderá hasta el próximo 14 de abril, será un «gran acto de solidaridad continental», dijo a la prensa cubana el secretario general de la Confederación General de Trabajadores de Perú (CGTP), Gerónimo López, uno de los organizadores.
En ese sentido, destacó el apoyo a la Revolución Cubana y reafirmó el respaldo a los gobiernos progresistas y de izquierda de América Latina y el Caribe que vienen siendo «saboteados por el imperialismo».
Entre los actos previstos, añadió, está una gran marcha antimperialista bajo el lema «Fuera Trump del Perú», que se llevará a cabo el día 12 de abril y a pocas horas de que el mandatario estadounidense arribe por primera vez a América Latina.
El periodista peruano Carlos Rombambil, de la emisora Radio Cielo, dijo a Granma que el pueblo de su país tiene la responsabilidad de dejar sentado cuál es el sentir de los latinoamericanos respecto a este presidente.
«El 12 de abril tenemos el compromiso de unirnos todas las fuerzas para demostrar a través de esta marcha antimperialista nuestro repudio a la presencia de Donald Trump y nuestro apoyo a la Revolución Cubana, la Revolución Bolivariana y los movimientos progresistas», añadió.
En medio de este escenario, también abre sus puertas hoy el Foro de la Sociedad Civil, un espacio liderado por la Organización de Estados Americanos que se utiliza para singularizar a países que no son del agrado de Washington.
Cuba, que asiste por segunda vez con una delegación, denunció que se intenta hacer pasar a mercenarios y grupos con vínculos terroristas como supuestos representantes de la sociedad civil de la Mayor de las Antillas, una estrategia que ya fue utilizada en la cita de Panamá en el 2015.
Los representantes legítimos de la sociedad cubana arribaron el domingo a Lima y ratificaron mediante una declaración que participarán en los foros paralelos y en la Cumbre de los Pueblos con «gran sentido de responsabilidad y espíritu constructivo», pero no se tolerarán provocaciones.