Guantánamo.- Sin lograr un consenso entre las partes, finalizó la III Cumbre entre la Comunidad de Países de Latinoamérica y del Caribe (Celac) – Unión Europea (UE) en Bruselas, Bélgica, donde jefes de Estado y Gobierno del continente americano exigieron reciprocidad y también eliminar las presiones colonialistas europeas hacia la región.
A pesar de las diferencias de posturas en asuntos de relación comercial y de política exterior, se logró durante el acto de clausura, que se hiciera énfasis en la necesidad de detener la injerencia de otros países hacia la zona, además de la urgencia de eliminar el bloqueo de Estados Unidos (EE. UU) hacia Cuba.
Los líderes latinoamericanos expresaron discrepancias con las políticas europeas, al tiempo que mostraron su posición neutral ante el tema Rusia y Ucrania.
Asimismo, rechazaron los intentos de vincular a Latinoamérica y el Caribe con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en su postura contra el Kremlin, refrendando el principio de América Latina y el Caribe como zona de paz, firmado en la segunda cumbre de la Celac en La Habana.
También abordaron la postura europea con respecto a Ucrania desde la perspectiva de los países del sur global, así como aseveraron que el viejo continente debe abandonar el doble rasero con respecto al tema.
Por otro lado, representantes latinoamericanos rechazaron las medicas coercitivas unilaterales (mal llamadas sanciones) impuestas por Estados Unidos (EE. UU). a Venezuela. Al tiempo, que exhortaron a Occidente y a Europa a respetar el derecho internacional.
Adicionalmente, los jefes de estado manifestaron su preocupación por la migración. Sobre el asunto el presidente colombiano, Gustavo Petro, propuso implementar un plan que permita atender las necesidades de los migrantes de manera conjunta sin violar sus derechos humanos.
Tomado de Telesur
