Guantanamo.- Con la magia de los juegos y fantasía finalizó el vigésimo séptimo curso de los talleres infanto-juveniles Danza Fragmentada, en el Teatro Guaso, de la ciudad Guantánamo, espectáculo dedicado a los 30 años de la compañía homónima, y a los 45 de vida artística de su director-fundador, Ladislao Navarro Tomasén.
“El juego de las vocales”, “Historia de una gata”, “El baile de las máscaras” y “Desespero” fueron algunas de las coreografías representadas por más de un centenar de niños y adolescentes, entre 5 y 18 años de edad, quienes mostraron sus dotes artísticas y el aprendizaje adquirido durante seis meses de lecciones de técnicas elementales de ballet, danza contemporánea y bailes populares.
La hoy bailarina de la compañía Danza Fragmentada y profesora, Yohanet Romero González, formada también desde muy pequeña en estos talleres infanto-juveniles, confiesa que le encanta el trabajo con sus discípulos, a quienes les monta las obras acorde a sus edades con pasos fáciles y divertidos, como imitar animales y la actuación.
En el espectáculo realizado el pasado domingo 9 de julio, en el principal escenario de la villa del Guaso, se presentó además el conjunto infantil de percusión cubana y folklórica “Los príncipes del futuro”, bajo la batuta del músico Rodelkis Balbier Sanrregré, mientras que la bailarina Dayana Audrey Zamora interpretó la pieza clásica “Mujer”.
Ideados por el reconocido maestro y coreógrafo Ladislao Navarro Tomasén, y su colectivo de bailarines, los talleres de creación Danza Fragmentada despiertan emociones y alegrías de sus alumnos, avivados por la creatividad de los movimientos y el ritmo de la música, explica Luz Elena Daudinot Batalla, quien figura como creadora de este proyecto, desde donde educan a las futuras generaciones en la estética de las diversas manifestaciones del arte.
La también especialista de danza del Consejo Provincial de Artes Escénicas anuncia la nueva matrícula de los talleres infantiles de Danza Fragmentada para el próximo mes de septiembre, cuando abrirán los salones de la sede de la compañía, para recibir a todo infante o joven interesado en el arte danzario.
La experimentada pedagoga, galardonada este año con el Premio Honorífico Elfriede Mahler, asegura que retomarán el próximo año el Concurso de Creación Infantil “Mi Mundo de Fantasía”, certamen que este año no se pudo realizar como se acostumbra al cierre de cada periodo académico, por ser este un curso atípico, pues sólo tuvieron pocos meses de preparación.
“Yo siempre hago énfasis en el concurso porque les permite a los pequeños crear sus propias coreografías, y es una experiencia gratificante para los niños y padres, quienes siempre colaboran para su máximo colofón”, finalmente dice la experta.
Por: Liubis Balart Martínez
Fotos: Olaph Jhoe Quiala
