La comunidad internacional apoyó este 28 de octubre, en Nueva York, la reelección de Cuba para servir un segundo mandato consecutivo de tres años en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
En sesión plenaria de la Asamblea General, que eligió a otros 13 países para el órgano con sede en Ginebra, la mayor isla de Las Antillas recibió el respaldo de 160 naciones, por lo que a partir del próximo 1º de enero continuará su gestión durante el período 2017-2019, como uno de los ocho representantes de América Latina y del Caribe.
Cuba había manifestado, de cara a su candidatura, el compromiso de seguir trabajando a favor del objetivo de lograr que todas las personas en el planeta disfruten de los derechos humanos, sobre la base del respeto a la Carta de la ONU, la cooperación y la solidaridad.
Con esta reelección, Cuba y su pueblo derrotan una vez más las campañas en su contra, enmarcadas en la manipulación y selectividad que aplican al tema algunas potencias occidentales, las cuales utilizan a organizaciones no gubernamentales, medios de prensa y contrarrevolucionarios como puntas de lanza.
La nación caribeña forma parte de la mayoría de los instrumentos adoptados por la comunidad mundial en materia de derechos humanos, 44 de 61, y fue uno de los 47 miembros fundadores del Consejo en 2006, cuando sustituyó a la Comisión de Derechos Humanos.