Una delegación del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos de Cuba cumplió en Francia una amplia agenda dirigida a explorar tecnologías que permiten una mejor distribución y uso del agua, informó el vicepresidente primero de la entidad, Abel Salas.
Según explicó el programa incluyó numerosas actividades como visitas a fábricas, empresas y proyectos constructivos, con vistas a conocer estas tecnologías nunca empleadas en la nación caribeña, y que podrían resultar muy útiles para el manejo eficiente de este recurso. ‘Es tema es estratégico porque el recurso agua es finito y sin ella no podemos vivir. El agua es vida, por eso necesitamos potenciar su cuidado, ahorro y protección’, señaló.
De acuerdo con el especialista, ‘todo tiene que ver con emplear tecnologías que nos permitan hacer un uso más eficiente del agua, lograr acortar los plazos de realización de las obras, conseguir llevar rápidamente el recuso de donde lo tenemos hacia lugares donde escasea, y también mejorar el tratamiento en general de las aguas’.
Para ello, la delegación -encabezada por Salas e integrada por el proyectista de túneles Pedro Ricardo y el encargado de supervisión de obras Ramón Quinta- visitó lugares donde están en uso tecnologías para la perforación de túneles que no implican una destrucción de la urbanización que se encuentra en la superficie de la tierra.
En concreto, comprobaron el funcionamiento de ‘tuneladoras’ y ‘microtuneladoras’, que se diferencian por las dimensiones de los orificios abiertos bajo la tierra y los materiales que usan para el revestimiento.
De acuerdo con Salas, estas tecnologías son caras pero permiten acortar plazos y hacer más eficiente la ejecución de obras como instalar conductoras para aguas crudas, potables y de otros tipos.
También visitaron empresas especializadas en plantas desalinizadoras del agua marina mediante el uso de energías renovables, lo cual sería muy útil para un país como Cuba, que está rodeado de mar. ‘Producir esta agua es caro, pero los costos se abaratan considerablemente al emplear energías como la fotovoltaica y la eólica’, explicó Salas.
Otras de las actividades fueron visitas a fábricas de tubos, a un laboratorio que vela por la calidad de la producción de hormigón y a una planta de tratamiento de residuales considerada la más grande de Europa, donde observaron todos los procesos para el manejo de los sólidos, los lodos y los gases. La agenda incluyó además varios encuentros con empresas francesas que podrían ayudar a Cuba en la aplicación de estas tecnologías.
De acuerdo con Salas, en esas reuniones la delegación visitante explicó detalles de la nueva ley para la inversión extranjera en la nación caribeña y las posibilidades que tienen las empresas foráneas para operar en la nación caribeña.
Licenciada en Español – Literatura. Periodista. Profesora Asistente. Habilitada en guión y realización de programas de TV. Editora del sitio digital de la televisión de la provincia de Guantánamo. Bloguera y activista de las Redes Sociales