Guantánamo.- El verano llega y con él las altas temperaturas, y el sol y la lluvia se conjugan con frecuencia. Las condiciones perfectas para la proliferación de vectores que ponen en peligro la salud humana, y la aparición de enfermedades tales como el dengue, las alergias y picaduras por insectos, las gripes e intoxicaciones alimentarias.
También la deshidratación, las quemaduras solares, la otitis y los hongos. Adoptar todas las medidas necesarias para reducir sus efectos es responsabilidad de cada persona, en especial los padres y tutores de niños y ancianos.
Eliminar los criaderos de mosquitos, lavarse constantemente las manos y el mantenimiento de la limpieza en el hogar, constituyen claves esenciales para nuestra salud. Beber líquidos de manera continuada, aunque no tengamos sed; entre un litro y medio y dos litros al día, es vital para evitar la deshidratación.
¿Como hidratarse durante el verano?
- Consume agua a lo largo del día y si hace mucho calor aún más: La cantidad mínima para un adulto es de 8 vasos al día.
- Si haces ejercicio, especialmente fuera de casa y durante los días más calurosos, ten la precaución de beber agua antes, durante y después de la actividad física.
- Si te cuesta tomar agua, puedes hidratarte de otra forma, por ejemplo jugos naturales como limonada, guarapo o hechos con trozos de frutas (piña, melón, frutabomba…).
- Los alimentos también aportan agua, por lo que contribuyen con la hidratación un ejemplo es leche, yogur, frutas, verduras, licuados de frutas.
- Evita en exceso el café y refrescos gaseados ya que tienen efecto diurético y así como se incorpora el liquido se elimina fácilmente.
¿Sabías que la sed es una señal de deshidratación? No esperes a tener sed para tomar agua. Otras señales son: boca y labios secos; sentirse mareado, cansado, con el ritmo cardíaco acelerado y el dolor de cabeza.
Los niños y los ancianos que son dependientes no suelen pedir agua, por eso es muy importantes ofrecerles líquido de manera permanente, aunque no lo pidan.
Contra las quemaduras e irritación en la piel, resulta necesario utilizar protectores solares siempre que se pueda, o protegerse de los rayos del sol, mediante el empleo de camisas de mangas largas, sombreros o sombrillas.
El verano es una estación propicia para el disfrute de la familia, pero en cada momento debe aflorar la responsabilidad. Si está en una piscina u otro sitio donde caminemos descalzos sobre un suelo mojado, cuide de sus pies, porque está expuesto a contraer hongos.
Las intoxicaciones alimentarias por su parte, pueden causar diarreas, náuseas o vómitos; por lo que no olvide tapar y cocinar bien los alimentos.
Prevenir las enfermedades comunes en el verano es su obligación, y para ello se trata de ser consecuente con cada una de las causas que las originan.
Licenciada en Periodismo. Máster en Ciencias de Nuevas Tecnologías de la Información para la Educación