Guantánamo.- El 2 de enero de 1959 partió desde Santiago de Cuba rumbo a La Habana, la Caravana de la Libertad, un día después de que el Comandante Fidel Castro Ruz proclamara el triunfo de la Revolución en los balcones del Ayuntamiento del Parque Céspedes de la urbe santiaguera.
Ese primer día, los rebeldes pasaron por Palma Soriano, Baire, Jiguaní, Santa Rita hasta que cerca de las 11 de la noche llegaron al Ayuntamiento de Bayamo.
De esa manera los barbudos, como se les conocía popularmente, se despedían de la Sierra Maestra, principal escenario de lucha, para marchar en caravana triunfal por diferentes ciudades cubanas, recibidos por el clamor de un pueblo agradecido y feliz de dejar atrás años de sufrimiento, dolor y miseria. Empezaba así una nueva era, se daban los primeros pasos de la incipiente Revolución.
Bayamo, Las Tunas, Camagüey, Ciego de Ávila, Santi Spíritus, Santa Clara, Cienfuegos, Matanzas y la capital fueron las paradas de la caravana de la libertad, que se extendió hasta el 8 de enero, un suceso que cada año rememora con orgullo el pueblo cubano.
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