Unidad y doctrina: la fuerza del Partido

Guantánamo. Es sábado,  día de fumigar en el barrio contra el mosquito causante de enfermedades… Vestidos de verde olivo,  jóvenes movilizados para esa faena llegan con sus bazucas,  a punto de iniciar el Séptimo Congreso del Partido Comunista de Cuba, PCC.  Mientras esperábamos disciplinadamente el tiempo aconsejado fuera de nuestras casas, mi vecino Rafael, inquieto y locuaz, me comenta: -“No dejaré que nadie me lo cuente. Voy a seguir este Congreso de punta a cabo”- , concluía.  Y es que a cada cubano digno le compete todo lo que trate acerca del único Partido heredero del fundado por Julio A. Mella y Carlos Baliño y enriquecido por la savia de generaciones de patriotas que los precedieron hasta nuestros días.  Su fuerza crece con la vinculación estrecha con las masas y la expresión de unidad y doctrina que emana de esa organización de vanguardia.  No es secreto para nadie que las aspiraciones de siempre de los enemigos internos y externos de la revolución cubana, fraguada en su historia con sangre y lucha desde 1968 hasta hoy, es descalabrar el proceso apelando a la división: “Divide y vencerás”, es su apotegma.  Quienes llaman al pluripartidismo parecen desconocer las propias enseñanzas que a lo largo de varios siglos han transmitido a este indómito e instruido pueblo. Olvidar la historia sería el modo más irracional de repetirla.  ¿En qué país donde funcionan más de un Partido se han resuelto las cuestiones básicas elementales de los seres humanos? Como reconoce en el propio Informe al magno evento el Primer Secretario del Comité Central del PCC, General de Ejército Raúl Castro Ruz, existen problemas objetivos y subjetivos, dentro y fuera del país,  los cuales la dirigencia de la nación tiene que solucionar, pero nada resulta ajeno a la organización.  Los temas que se debatirán en el Congreso son los mismos que preocupan al pueblo. La situación económica con el gran obstáculo que representa el bloqueo imperialista, los precios de alimentos, el salario, la sostenibilidad de los logros, contando con nuestras propias potencialidades…  Los lineamientos emanados del Sexto cónclave de los comunistas cubanos y los Objetivos de Trabajo de la Primera Conferencia Nacional del PCC son la guía. Los resultados de los debates serán expuestos y discutidos con las masas.  Es la muestra de que la fuerza del Partido crece con su vinculación estrecha con las masas y la fortaleza que le da a esa organización de vanguardia la unidad y doctrina que de ella emana.  Mientras, como mi vecino Rafael,  yo tampoco dejaré que nadie me lo cuente y voy a seguir este Congreso de punta a cabo.Guantánamo. Es sábado, día de fumigar en el barrio contra el mosquito causante de enfermedades… Vestidos de verde olivo, jóvenes movilizados para esa faena llegan con sus bazucas, a punto de iniciar el Séptimo Congreso del Partido Comunista de Cuba, PCC.

Mientras esperábamos disciplinadamente el tiempo aconsejado fuera de nuestras casas, mi vecino Rafael, inquieto y locuaz, me comenta: -“No dejaré que nadie me lo cuente. Voy a seguir este Congreso de punta a cabo”- , concluía.

Y es que a cada cubano digno le compete todo lo que trate acerca del único Partido heredero del fundado por Julio A. Mella y Carlos Baliño y enriquecido por la savia de generaciones de patriotas que los precedieron hasta nuestros días.

Su fuerza crece con la vinculación estrecha con las masas y la expresión de unidad y doctrina que emana de esa organización de vanguardia.

No es secreto para nadie que las aspiraciones de siempre de los enemigos internos y externos de la revolución cubana, fraguada en su historia con sangre y lucha desde 1968 hasta hoy, es descalabrar el proceso apelando a la división: “Divide y vencerás”, es su apotegma.

Quienes llaman al pluripartidismo parecen desconocer las propias enseñanzas que a lo largo de varios siglos han transmitido a este indómito e instruido pueblo. Olvidar la historia sería el modo más
irracional de repetirla.

¿En qué país donde funcionan más de un Partido se han resuelto las cuestiones básicas elementales de los seres humanos? Como reconoce en el propio Informe al magno evento el Primer Secretario del Comité Central del PCC, General de Ejército Raúl Castro Ruz, existen problemas objetivos y subjetivos, dentro y fuera del país,  los cuales la dirigencia de la nación tiene que solucionar, pero nada resulta ajeno a la organización.

Los temas que se debatirán en el Congreso son los mismos que preocupan al pueblo. La situación económica con el gran obstáculo que representa el bloqueo imperialista, los precios de alimentos, el salario, la sostenibilidad de los logros, contando con nuestras propias potencialidades…

Los lineamientos emanados del Sexto cónclave de los comunistas cubanos y los Objetivos de Trabajo de la Primera Conferencia Nacional del PCC son la guía. Los resultados de los debates serán expuestos y discutidos con las masas.

Es la muestra de que la fuerza del Partido crece con su vinculación estrecha con las masas y la fortaleza que le da a esa organización de vanguardia la unidad y doctrina que de ella emana.

Mientras, como mi vecino Rafael,  yo tampoco dejaré que nadie me lo cuente y voy a seguir este Congreso de punta a cabo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *