Guantánamo.- Un opioide sintético hasta 40 veces más fuerte que el fentanilo y hasta 800 veces más potente que la morfina pone en jaque la respuesta de las autoridades sanitarias estadounidenses a la crisis de drogadicción en un número creciente de ciudades del país.
Se trata del nitazeno, un narcótico que puede encontrarse en polvo, píldora o líquido, y que en ocasiones está mezclado con la heroína, la cocaína o incluso con analgésicos, lo que expone al consumidor a una sobredosis debido a su extrema potencia.
Esta droga es potencialmente letal y puede también causar un inicio más grave de los síntomas de abstinencia. Los expertos señalan que se requiere mucho tiempo de trabajo de laboratorio para poder detectarla y los centros hospitalarios no distinguen el nitazeno de los casos de intoxicación por fentanilo, recoge Axios.
Originalmente, los nitazenos fueron desarrollados a partir de componentes sintéticos hace unos 60 años por unos investigadores que trabajaban para una compañía farmacéutica creando medicamentos contra el dolor como una alternativa a la morfina. Sin embargo, se decidió cancelar su desarrollo por el alto potencial de sobredosis que presentaba.
Actualmente varios estados de EE.UU., entre ellos Washington D.C., han detectado la circulación de esta droga. En la ciudad de Filadelfia (Pensilvania) se emitió una alerta pública después de que el opioide apareciera en cuatro muestras de drogas callejeras. En Tennessee las sobredosis relacionadas con el nitazeno pasaron de 10 casos en 2020 a 42 en 2021, mientras que en Ohio se multiplicaron casi por siete los casos de nitazeno (de 27 a 143) entre el primer trimestre de 2021 y 2022.
La Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) calificó la continua evolución de los opioides sintéticos como los nitazenos como «un problema de salud pública». Se trata de «una droga que nunca fue aprobada para uso médico, los nitazenos provienen de China y se mezclan con otras drogas», advirtió.
«La gente debe tener en cuenta que, con todas las drogas sintéticas que existen y la forma en que se mezclan, uno nunca sabe lo que realmente está comprando», agregó la analista de inteligencia de la DEA, Maura Gaffney.
Tomado de Cubasí