Una carta para mi amigo Fidel (+ Fotos)

Guantánamo.- Melani Martínez Osorio es una niña de 13 años, y tiene una disimulada pasión por la historia, así lo confiesa, aunque con timidez, mientras comenta de las motivaciones de su nuevo profesor de la materia, Eusebio Otamendy Pelier, que la inspiran a acercarse mucho más a la historia patria, y a profesar, amor por la cultura e identidad local y nacional, y respeto a quienes como Fidel, hicieron de Cuba una sociedad mejor.

Precisamente de esa manera llegó al concurso Una carta para mi amigo Fidel, un certamen convocado por su maestro en la propia escuela, el Centro Mixto Mártires de la Gloria, ubicado en el asentamiento de Cayamo, del guantanamero municipio de Caimanera.La iniciativa forma parte de la jornada de homenaje a Fidel Castro Ruz, al tercer aniversario de su viaje a la eternidad, quien siempre vio a la educación como un poderoso instrumento de transformación, y el camino hacia la dignidad, justicia y equidad plenas.

“La idea era escribirle una carta al Líder histórico de la Revolución Cubana, refiere el profesor Otamendy, en la que los estudiantes pudieran expresar sus sentimientos hacia él, viéndolo como un hombre de carne y hueso, y no un dogma, sino como él vio en su tiempo a Martí y a otros héroes. “Todos expusieron sus pareceres, que era libre como el aire, una paloma blanca como precursor de la paz, y muchas otras impresiones”, concluyó.

Melani resultó ser la ganadora por la calidad del texto, la excelente redacción y porque supo explicar cada palabra y línea escrita frente a un colectivo de profesores. Para ella Fidel es más que un padre, es simplemente un árbol que nos cobija con sus grandes ramas, es el entusiasmo con el que debe asumirse cada tarea en la vida, pero es también felicidad.

Los niños y niñas de Caimanera, a nombre de los cubanos, agradecen al Comandante en Jefe, quien no solo convirtió cuarteles en escuelas, sino que desplegó una hazaña participativa para alfabetizar a todo un pueblo en menos de un año al triunfar la Revolución Cubana. Antes de su llegada eran miles los excluidos del pan de la enseñanza, sobre todo los infantes en edad escolar, una de las mayores conquistas sociales que logró Fidel.

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