Sonidistas: La impronta de una especialidad

Guantánamo. – Una de la lecciones más difíciles y más tempranas tras mi llegada a la televisión fue aprender a trabajar en equipo. Entre los profesionales, técnicos y artistas que conforman el mundo de las imágenes en movimiento se encuentran los sonidistas.

El técnico de sonido es aquel profesional encargado de que la calidad del sonido que se capte, registre y/o reproduzca en cualquier proyecto y evento sea la mejor posible.

Son ellos los profesionales encargados de ajustar la captura de los sonidos en las grabaciones y la emisión de los mismos, con la calidad requerida durante las transmisiones. Ello requiere de experticia, superación constante y en el contexto cubano mucha inventiva.

En el multimedio Solvisión contamos felizmente con una especialista, Gloria Despaigne, fundadora del canal, por lo que ha visto evolucionar con el tiempo la tecnología desde las antañas y pesadas grabadoras hasta las balitas y micrófonos que sin dudas mucho humanizan el trabajo cuando se encuentran en buen estado técnico. Ella ha Sido testigo de la evolución del medio pero también maestra de generaciones de sonidistas, incluidos los que hoy junto a ella se desempeñan en la profesión.

A nuestros sonidistas les debemos trucos tales como emplear un trapeador como vara, mantener una incomoda posición para lograr una toma con un audio limpio sin que se vea el micrófono – o quien lo opera – y capturar cada inflexión de voz o sonido ambiente, que permita luego recrear e incluso enriquecer, en pantalla, la esencia del momento vivido y captado por las cámaras.

En esa especialidad también se desempeñan otros más noveles como Iván Basulto y quiénes simultánean con otras ocupaciones como Ordabis Lachey – quien es además chófer y mecánico – o Eddy Matos – también luminotécnico -.

Cada cuatro de diciembre en Cuba se celebra el Día del sonidista, un pretexto para homenajear y agradecer a estos profesionales de los medios de comunicación, responsables de moldear y dar vida al producto final que llega a las audiencias. Llegue en estas letras todo el reconocimiento a los nuestros pero también a los que laboran en nuestro sistema radial, porque sin ellos la magia de la comunicación, tal cual la conocemos ahora, no sería posible.

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