Guantánamo.- En medio de la situación energética que padece Cuba, el servicio de transporte público es sin dudas el más afectado, de ahí la necesidad de reordenar, y no paralizar, el traslado de pasajeros en la ciudad, hacia los municipios y provincias.
Las autoridades de Guantánamo informan el aseguramiento del servicio urbano en la ciudad cabecera y en Baracoa, en comunidades ubicadas en las periferias de algunos municipios, en las zonas rurales, y la transportación marítima entre Boquerón y Caimanera. Todos estos se mantendrán en tanto así lo permita la disponibilidad de combustible.
Desde el momento en que se aplicaron las medidas, se establecieron inspectores del Consejo de la Administración Provincial en los puntos de embarque y mini terminales, quienes facilitan el uso de vehículos estatales como apoyo a la transportación alternativa.
Por su parte la UEB Ómnibus Nacionales redujo a una, las salidas de la ruta Guantánamo-La Habana, que será en el horario de las 3.30 de la tarde. Se potenciarán los viajes en tren, debido a que este medio permite un mayor ahorro de combustible. En ese sentido, se alargó a cinco días el ciclo del tren habanero, y fueron suspendidas las salidas con destino a Holguín y Bayamo.
Otras de las prioridades bien definidas por las autoridades del territorio son los servicios médicos, de ambulancias y fúnebres, además, se retomará el empleo de la tracción animal, sobre todo para la agricultura y la recogida de desechos sólidos.
Pese a las dificultades energéticas existentes, la vida en Cuba no se detiene, ejemplo de ello lo son las regulaciones temporales adoptadas, una reafirmación de que nadie logrará el propósito de debilitar a la Revolución ni mucho menos doblegar al pueblo cubano, como bien expresara Miguel Díaz-Canel, presidente de los Consejos de Estado y de Ministros.
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