Fuentes policiales señalaron que cuando los oficiales intentaban detener al sospechoso, este los provocó y les dijo que lo mataran, pero finalmente no recibió heridas graves.
El joven de 25 años, quien al parecer no tiene antecedentes penales, reside en la zona de Richmond Hill, en el norte de Toronto.
Según el gobierno federal el hecho no parece estar conectado en ninguna forma con la seguridad nacional del país, y no existen indicios de que Minassian tenga vínculos conocidos con organizaciones terroristas, aunque la acción fue deliberada.
La primera víctima identificada por la policía fue Anne-Marie D’Amico, quien trabajaba en la sede de la compañía financiera estadounidense Invesco en Toronto, según señala este martes la cadena CBC News.
La acción coincidió con la celebración en esa ciudad de un encuentro de titulares de Asuntos Exteriores y de Seguridad del Grupo de los Siete (G7).
El primer ministro Justin Trudeau expresó la víspera su gran tristeza por este ‘ataque trágico y sin sentido’, y en nombre de los canadienses ofreció sus condolencias a los familiares de los fallecidos y deseó una pronta recuperación a los lesionados.