Al historiador de La Habana, doctor Eusebio Leal Spengler, dedicó Viengsay Valdés, directora del Ballet Nacional de Cuba, el Premio Positano de la Danza Léonide Massine como Mejor Bailarina en la escena internacional, con el que fuera galardonada en la noche del pasado sábado.
«Este es mi homenaje personal y profesional a esa figura cumbre de nuestro país. Y estoy segura de que será el primero de los tantos que se merece», comentó a Granma la primera bailarina.
«Vi en Leal a un hombre consagrado, como mismo lo fueron en vida mis maestros Alicia y Fernando Alonso», declaró Valdés en el mensaje virtual enviado a los organizadores del lauro. «Leal supo ver que, incluso en los tiempos más difíciles para nuestro pueblo, el ballet, en otros escenarios del mundo, levantaba la estrella solitaria y hacía que el aplauso fuese una victoria».
Debido a la actual situación epidemiológica que vive el orbe, la talentosa artista no pudo recoger personalmente el reconocimiento, por lo cual el embajador de Cuba en Italia, José Carlos Rodríguez, recibió el galardón de manos del alcalde de Positano, Michele De Lucía.
Durante la gala, el diplomático aseguró que el 48 Premio Positano de la Danza Léonide Massine es un reconocimiento de resistencia, por haberle abierto un espacio a esa manifestación artística en este año tan difícil. Además, subrayó que Viengsay Valdés representa a la escuela de ballet creada en Cuba, semilla de muchos grandes artistas, al mismo tiempo que sentenció que no puede pensarse en el pueblo cubano sin la danza en todas sus formas posibles.
Por otra parte, en la ceremonia se proyectó un fragmento del videoarte ParAlicia, interpretado por Valdés y Alicia Alonso, con coreografía de Tania Vergara, dirección audiovisual de Alejandro Pérez y música de Frank Fernández, pues dicho lauro es también un homenaje, en el marco de su centenario, a la prima ballerina assoluta, leyenda del ballet mundial, fallecida en 2019.
Finalmente, Viengsay Valdés manifestó: «Aspiro a seguir trabajando para expandir el legado de mis ídolos y consagrarme al ideario de mis maestros, para que el ballet cubano siga coronando a nuestra nación y abriéndole puertas en todo el mundo».
Además de la célebre bailarina, también otro cubano fue reconocido por el jurado, el primer bailarín del Staatsballet Berlin, Alejandro Virelles, premiado como uno de los mejores bailarines del planeta en este 2020.
Tomado de Granma
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