Guantánamo.- Apuestan al peligro y carecen de miedo aunque corran el riesgo de quedar al descubierto. Van por el camino de la vida protegiendo a los ciudadanos. La vocación, la valentía, el amor a su trabajo y el silencio, son sus principales armas. Para estos hombres y mujeres, oficiales del Ministerio del Interior (MININT), los riesgos y los sacrificios, no constituyen inconvenientes.
El MININT, fue fundado el 6 de junio de 1961, en pleno proceso de institucionalización del Gobierno revolucionario de Cuba y a menos de dos meses de la demoledora derrota propinada a la administración norteamericana y sus mercenarios de Playa Girón.
Son imborrables las huellas de sus oficiales y disímiles las trincheras que derriban a diario. Algunas involucran el enfrentamiento directo a las indisciplinas sociales y las ilegalidades, la subversión política de los servicios de inteligencia de los Estados Unidos y sus aliados que anhelan ver a Cuba mirando al pasado capitalista. Otras conllevan el silencio, la serenidad y la entereza de los Órganos de la Seguridad del Estado.
Imborrables son las huellas de sus oficiales en el enfrentamiento a la contrarrevolución, las actividades terroristas y de subversión política de los servicios de inteligencia de los Estados Unidos y sus aliados que anhelan ver a Cuba mirando al pasado capitalista.
Con la tenencia de una formación completa de las modernas tecnologías de la comunicación, ellos descuellan, además, en su lucha contra las manifestaciones delictivas, el amparo de los bienes públicos y el medio ambiente, la defensa de las costas cubanas, en acciones contra desastres de la naturaleza… A estos oficiales, las 24 horas del día no les alcanzan porque le pertenecen al deber.
Es difícil hablar de la labor de los oficiales del MININT en estos años junto a la Revolución y a su pueblo. Es difícil hablar de quienes a cara descubierta unas veces y otras, desde el anonimato, han cumplido sin descanso la compleja y peligrosa tarea de advertir a tiempo el peligro, y además, enfrentarlo y derrotarlo sin temor alguno.
Y se hace difícil porque estos oficiales tienen por delante un trabajo duro y difícil, pero a su vez, muy hermoso. Un trabajo que se traduce en la garantía de tranquilidad para todos los ciudadanos cubanos, además de preservar los objetivos económicos, políticos y sociales de la nación.
Hoy, firmes y convencidos de que la Revolución es invulnerable, los hombres y mujeres del MININT, a quienes no les alcanzan las 24 horas para cumplir con su deber, celebran su día. Ellos, escudo y garantía de la integridad de la Patria, son defensores de los más caros sueños de nuestro pueblo.
Licenciada en Español – Literatura. Periodista. Profesora Asistente. Habilitada en guión y realización de programas de TV. Editora del sitio digital de la televisión de la provincia de Guantánamo. Bloguera y activista de las Redes Sociales