Guantánamo (Redacción Solvisión) La impronta del Poeta Nacional cubano, Nicolás Guillén, durante su viaje a este país en enero de 1947, perdura hoy en la colectividad afrouruguaya, ante el empeño de rescatar la Revista Mensual Independiente Nuestra Raza.
Esa publicación, prédica de difusión de la cultura negra, surgió en 1917 en un pequeño pueblo llamado San Carlos, en el departamento de Maldonado, dijo en entrevista con Prensa Latina Jorge Bustamante, archivero y bibliotecario de la Casa de la Cultura Afrouruguaya.
El especialista destacó que la revista tuvo como particularidad el estar dirigida por los hermanos María Esperanza Barrios, Ventura Barrios y Pilar Barrios, los tres autodidactas y con apenas formación escolar, pero con un profundo sentido de abordar los problemas sociales y culturales de la época.
No solo se preocuparon por conocer la realidad de los afrouruguayos, sino también de los colectivos afros de toda América, e inclusive del desarrollo del contexto africano, para divulgarlo a través del periódico, sostuvo.
Contó el entrevistado que Nuestra Raza dejó de publicarse el mismo año en que surgió por problemas económicos y “después de un impase comienza a salir nuevamente en 1933 y lo hace de forma ininterrumpida por 15 años, hasta 1948”.
Ellos intentaron, y creo que lo consiguieron de alguna manera, a través de la publicación, decir “nosotros no solo somos los negritos de los barrios Sur y Palermo que tocamos tambor, y tomamos vino en las esquinas”, reflexionó.
Subrayó que en nuestro colectivo “también tenemos artistas plásticos, poetas, escritores, periodistas, que a pesar de no tener una formación, sí tenemos la capacidad de superarnos por nuestros propios medios”.
Bustamante señaló que la visita del bardo cubano a Uruguay se inserta en la campaña de Nuestra Raza por promocionar todos los valores afro de Latinoamérica, e inclusive de Estados Unidos, ya fuesen poetas, escritores, artistas plásticos y de la danza.
Ahí está el caso de Nicolás Guillén, “ellos son lo que impulsan que el poeta cubano venga a Uruguay y lo acompañan en las distintas actividades programadas, no solo en Montevideo, sino también en el interior del país, donde visita los departamentos de Salto y Durazno, entre otros territorios.
En el número 162 de febrero de 1947, la publicación reseñó la estancia del poeta caribeño así: “Ha llegado Nicolás Guillén, suma poesía y experiencia popular que tiene una raíz en la Cuba mulata y revolucionaria, con él llega algo sorpresivo, llega la alegría sabrosa del Caribe y algo del conjuro de sus caimanes y de los denuestos de la United Brentâ.”.
Hay otro que dice: Nuestra Raza le dedica este número de homenaje “a la esperanza de América en su visita al Uruguay”, este es de febrero de 1947, con una foto desplegada en la portada.
El periódico le hizo un seguimiento permanente, “muy pegadito a él estuvieron”, muy interesante lo que decía y se difundió mucho su poesía, “incluso él obsequiaba poemas a la publicación para que ellos la divulgaran”, apuntó.
Ellos lo consideraban como uno de los poetas más importantes de Latinoamérica y había un conocimiento pleno de quién era Guillén, además de la importancia que tenía no solo para la cultura cubana, sino para toda América Latina, remarcó.
Licenciada en Español – Literatura. Periodista. Profesora Asistente. Habilitada en guión y realización de programas de TV. Editora del sitio digital de la televisión de la provincia de Guantánamo. Bloguera y activista de las Redes Sociales