Guantánamo.- Murió Fidel: dos palabras que bastaron para dar la noticia. Ha pasado las horas y aún no se asimila, el dolor sigue ahí, latente. Duele porque la noticia fue drástica, tan estridente que ha dejado una huella que permanecerá en la memoria histórica de la Humanidad, donde vivirá por siempre el Comandante guerrero Fidel Castro Ruz.
La muerte de nuestro Fidel, es una perdida irreparable, de esas de las que no podemos recuperarnos en toda la vida, sin embargo, vive y vivirá por siempre en nuestros corazones, en cada pionero, en cada revolucionario, en las alegrías de nuestro pueblo, que no lo dejara morir jamás porque para marchar hacia el lugar donde los grandes permanecen por siempre: La inmortalidad.
Llora Cuba. Llora Latinoamérica toda. Lloran los hombres y mujeres del mundo. Ha muerto el gigante, sin embargo, es imposible que mueran sus ideas, su ejemplo, su coraje, su pensamiento latinoamericanista e integrador, su solidaridad con los desposeídos, su amor por la humanidad toda.
La muerte no es verdad cuando se ha cumplido bien la obra de la vida y eso has hecho tú, Fidel. Y lo seguirás haciendo porque aún después de muertos, somos útiles, tu ejemplo perdurará por siempre en el pueblo que fundaste, imperecedero joven rebelde de la Sierra Maestra y el tenaz luchador por la liberación de los pobres del mundo.
Con orgullo recordamos al gigante de verde olivo, al artífice de la Revolución Cubana, al estadista brillante, al portador de una imponente personalidad y una sabiduría que perdurará en todos los hombres de Cuba, Latinoamérica y del mundo. Fidel, se te quiere y admira en Cuba y más allá de las aguas que bañan este verde archipiélago.
Se te quiere porque estás en todas partes: en el aire, en el agua, en el fuego, en el amor. Estás a punta de pluma avisando al soldado donde poner la mira, diseñando un parque de diversiones para los niños o inaugurando una escuela casi pegada al mar, pero ahí, junto a tu pueblo.
Y es que nadie como tú has sido capaz de cargar con tantos sueños y ponerlos al alcance de la mano. Nadie como tú, has sabido conducir los destinos de un pueblo que tiene la osadía de defender su propio destino, fuiste tú quien nos enseñó a ser audaces, única manera de ser libres.
Con tu ejemplo, iluminas el rostro de todos los cubanos, para acrecentar la valía de un hombre como tú, despojado de linaje alguno. Hoy nos queda tu voz, tu ejemplo, tu presencia infinita que, cual bastión inquebrantable, nos prepara para desafiar las realidades, Fidel.
Hasta siempre mi comandante, el Fidel del Moncada, del Granma, de la Sierra, de Playa Girón, el mentor de la Batalla de Ideas, el guía de millones de pobres de todo el mundo. Cuba vivirá por siempre orgullosa de haber tenido entre sus hijos al hombre más grande de la historical de estos tempos. Gracias por darnos esa oportunidad.
Irónica que es la vida. Se nos va nuestro comandante Fidel Castro justo el día en que hace 60 años, navegará eternamente en el Granma para hacer aquel viaje hacia la historia. La personalidad de quien que no escatimó esfuerzos ni desvelos para llevar adelante esta bella y heroica utopía hasta la realidad que somos, nos ha dejado un gran vacio en nuestros corazones. Gracias por dedicarnos la vida entera y mostrarnos el camino a seguir.
Licenciada en Español – Literatura. Periodista. Profesora Asistente. Habilitada en guión y realización de programas de TV. Editora del sitio digital de la televisión de la provincia de Guantánamo. Bloguera y activista de las Redes Sociales