Mi querido, mi viejo…. (+ Video)

Pasan días, y hasta semanas, en las que la única comunicación es a través del teléfono y un “dile que llamé y que lo quiero, que pronto voy por allá…” y esa visita se sigue posponiendo, aunque no dejo de tenerlo presente en casa segundo de mi vida. Pero se que él, mi viejo, lo sabe.

Entonces cada tercer domingo de junio; llueva, tuene o relampaguee, me esmero por terminar el almuerzo más temprano – que siempre me toca en esos días – y entre los tragos inevitables con mi hermanito e hijo, la música y el “bailao” en familia, saco el tiempo para ir a ver mi papá.

A veces le llevo de regalo en un CD sus temas favoritos de Oscar de León, Raphael u Orlando Contreras, otras es una postal o simplemente ese abrazo y ese beso en la frente, el deleite de escucharlo narrar esas historias de vida, dignas para recoger en un libro, de cuando se alzó descalzo en las lomas del El Salvador o de su participación, como miembro del Ejército Rebelde en el asalto al cuartel de Imías.

Otras, sencillamente disfruto del placer de la compañía de este hombre, hoy con más de 80 años, con una pierna amputada y esa memoria divina – mejor que la mía- que parco como siempre, en ocasiones deja escapar una frase o una mirada que traduce todo ese amor guardado en un corazón que se me antoja demasiado seco, pero donde al mismo tiempo atesora una infinidad de ternura y adhesión hacia sus hijos.

Así es mi papá Danilo, férreo e indescifrable, pero al mismo predecible como todo padre que se desvive por sus niños –aunque ya les hallamos dado nietos-. Por eso me desvelo cuando su salud se resquebraja, por eso lo aprieto contra mi pecho y le beso, y le digo te quiero” …

El no esboza una sonrisa con facilidad, ni te dice frases tiernas cuando más las necesitas, como tampoco te hace esos “cariñitos” que tanto he anhelado, pero sí ha dado estado ahí en cada situación complicada de mi vida, sin siquiera anunciarse, y ha resuelto todo dejado claro que es el papá de Elayne, el mío…

Te amo papá. Y a pesar de que te lo reitere cada Día de los Padres, tú sabes que es un sentimiento que forma parte ineludible de mi vida, ¿verdad?

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *