¿Mi calle o el nuevo río de la ciudad? (+ Fotos)

Guantánamo. – Esta mañana, al salir de casa para ir a trabajar me surgió la duda de en qué fecha exacta mi calle se había convertido en uno de los tantos ríos o afluentes que atraviesan la ciudad de Guantánamo.

Vivo en Santa Rita % 15 y 16 norte, en el Reparto Caribe de la ciudad capital, dirección que colinda con uno de los parques infantiles más grandes de la urbe, “La Edad de Oro” y que durante el Verano 2018 se mantuvo inundado a causa de un salidero sin solución, tan necesaria en los tiempos que corren.

No solo se desperdicia el agua potable, preciado líquido que no en vano estamos llamados a ahorrar, sino que se genera una situación ambiental que cada día se agrava, teniendo en cuenta las frecuentes lluvias que caracterizan los meses de septiembre, octubre y noviembre.

Al principio molestaba el fango que se hacía, los pies o la ropa que se ensuciaban, pero ahora mismo es un río incontrolable, no una vía de la cuidad, unido al micro-vertedero del barrio, que dicho sea de paso, es recogido en tiempo por los compañeros de comunales pero a diario resurge. Preocupada, alerto que mi calle se ha convertido en un riesgo ambiental.

El inicio del curso escolar, impone para padres y escolares, acostumbrados a esa vía, un reto de agilidad para sortear los inmensos charcos y poder llegar a sus centros escolares: el círculo infantil “Los Camilitos” o el seminternado “Iván Adel Rodríguez Rodríguez”, ubicados en las inmediaciones de la comunidad.

El caso es que con el alto índice de infestación por el mosquito Aedes Aegypti que tiene la provincia, ¿cómo vamos a darle carta blanca a semejante vector? a sabiendas de que además de los vecinos del lugar, pueden enfermar de dengue, zika o chikungunya los niños que visitan las instituciones antes mencionadas.

¿La solución? No basta en este caso el empeño popular para eliminar el enyerbamiento o el accionar de las fuerzas del orden para imponer la ley y multar a quienes promuevan los vertederos. Toca jugar un papel activo a la Empresa de Acueducto y Alcantarillado, que tres meses después de denunciado el problema, no ha dado una respuesta efectiva, al menos en mi modesta opinión.

Lo peor es que aumentan: el cauce del río y los casos de febriles sin contar la pérdida de miles de litros de agua, que luego lloraremos. Urge llegar a un acuerdo y resolver un problema que afecta a muchos para que Santa Rita vuelva a ser calle y no río.

Imágenes del lugar:

Vista ampliada donde se puede apreciar el micro-vertedero y de fondo el parque infantil “La Edad de Oro”

Desechos sólidos y escombros

Acumulación de agua y desechos

 Acumulación de agua y desechos

 

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