Guantánamo.- Tras ampliar capacidades productivas y tecnológicas la Empresa de Industrias Locales Varias de Guantánamo comienza a consolidar su producción de losas de falso techo, con fibras de coco y yeso, innovación que en breve se patentizará y se abrirá camino al mercado nacional.
Dicho surtido, de iniciativa guantanamera, ha probado su calidad en el territorio, alarga la cadena de aprovechamiento del coco, es factible para generar ingresos y sustituir importaciones, y su comercialización se favorecerá con el auge de inversiones constructivas en el sector empresarial y privado.
Jorge Sierra, director general de la empresa, comentó que la idea de utilizar las fibras del llamado Árbol de los 100 usos en esas fabricaciones se originó a fines de 2015 y fue resultado de varias experimentaciones del grupo de desarrollo de la entidad, para lograr la estructura ideal, en cuanto a dureza, peso y belleza.
Otro de los méritos de esta innovación es que abarata su materia prima, otorgándole utilidad a la cubierta del fruto del cocotero, por lo general desechada en los campos en detrimento del medio ambiente.
El directivo señaló que la decena de obreros del Taller de Artesanías del Yeso, de esta ciudad -encargado de producir las losas- ha logrado en lo que va de año más de mil 200 metros cuadrados de estas, cantidad que debe multiplicarse por 10 en lo que resta de 2016, gracias a las capacidades recién ampliadas.
Inicialmente se preveían cuatro mil metros cuadrados anuales de ese surtido estrenado en enero, pero tras sugerencia de Mariño Murillo, Ministro de Economía y Planificación, se crearon condiciones para triplicar el plan, que en el segundo semestre se verá respaldado con el aumento de plantilla del taller y doble turno de trabajo.
Sierra argumentó que se trabaja según el pedido del cliente, de acuerdo a tamaño, colores y diseños decorativos de la pieza, con cierta diversidad de opciones en la que ha sido primordial la creatividad de quienes están a pie de obra.
Hasta el momento el precio establecido, por metro cuadrado, es de 90 pesos con 93 centavos, en moneda nacional, y los principales destinos son entidades mayoristas, pero según vaya creciendo la productividad su venta beneficiará también a la población y competirá con los similares importados.
Como parte de su gestión la Empresa Provincial de Industrias Locales Varias ha previsto además, brigadas para realizar el montaje del falso techo, servicio que añadirá un valor agregado al nuevo producto.
Ahora se labora en los estudios de factibilidad y presentación de propuestas de inversión al plan de la economía de 2017, que asegurarán hasta 50 mil metros cuadrados anuales de las losas, cuyas materias primas se generan de forma natural en la provincia, lo cual garantiza la sostenibilidad del proyecto.
También las proyecciones abarcan la apertura de otros talleres para estos fines en Baracoa, polo productivo del coco, a unos 90 kilómetros de San Antonio del Sur, donde existe la importante mina de Los Ciguatos, que tributa el yeso (sulfato cálcico), el otro componente de la innovación guantanamera.
Las losas para falso techo aspiran a figurar entre los artículos líderes de la empresa conocida también por su nombre comercial Velisas, la cual agrupa seis unidades básicas, representaciones en los 10 municipios y 65 talleres en los que se producen más de 200 renglones, muchos de ellos materiales para la construcción.