La Rosa de Cuba, para su pueblo, nunca morirá (+ Video)

Rosita Fornés. Foto: Tomada de FacebookProfundo pesar despertó en los cubanos la noticia del fallecimiento de la gran Rosita Fornés, una leyenda de nuestros escenarios que con carisma y talento se convirtió en la definición misma de la palabra “vedette”.

A los 97 años dijo adiós a una larga vida dedicada a la cultura cubana, a la cual puso en alto en cualquier parte del mundo a la que llegó con su destacado desempeño como cantante, bailarina, actriz, pero también por su notable belleza.

Lejos de su Cuba la sorprende la muerte, mas su nombre y figura trascienden fronteras y los cubanos la sabemos universal, por eso las redes sociales han explotado hoy, por ella, con los recuerdos de quienes la conocieron o de quienes, simplemente, la admiran.

Entre las condolencias a familiares y amigos y las fotografías de la vedette en diferentes momentos de su vida, sobresalen los homenajes a su trayectoria y la celebración de su entrega al arte.

Sus interpretaciones de Noche de Ronda, La Violetera, Amor Secreto, entre tantas, quedarán por siempre en el corazón de quienes tuvimos el placer de disfrutarlas, destacaba en un post el Instituto Cubano de la Música.

A su vez, la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, publicaba que “este 10 de junio, ella, que “hace rato conquisto la cima de lo intemporal”, dio su paso final a la inmortalidad”.

Así quedará para siempre en el recuerdo de generaciones, porque para muchas trabajó. Sus contemporáneos le recordarán como uno de los rostros más respetados de la época dorada del cine mexicano o dando lo mejor de su juventud a la opereta, la zarzuela, la comedia ligera, el drama clásico, la revista musical, el cabaret, la radio y la televisión en Cuba, de la cual fuera fundadora.

Se le vio cantar con Bola de Nieve, Benny Moré, Ernesto Lecuona, Rodrigo Prats, Adolfo Guzmán y Armando Romeu y actuar junto a iconos del séptimo arte de los años 40 y 50 del pasado siglo como Libertad Lamarque, Rita Montaner y Hugo del Carril.

Con elegancia y talento indiscutibles llegó también a los corazones de admiradores cada vez más jóvenes, a los cuales fue cautivando con inolvidables interpretaciones como la obsesiva Gloria de Se permuta (1983), filme de Juan Carlos Tabío que gracias, en gran parte, a su entrega, es una de las grandes joyas de la comedia cinematográfica del país.

Su obra fue reconocida con importantes lauros como los premios nacionales de Música (2005), Teatro (2001) y Televisión (2004), y fuera del país con el premio de Honor al Mérito, de México y la Orden del Mérito Civil de España, otorgado por el Rey Juan Carlos en 2011.

El último homenaje que se le hizo en vida fue el 2 de abril de 2019 con motivo de sus 80 años de vida artística y su 96 cumpleaños, el cual tuvo lugar en el Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso, precisamente el escenario en el cual debutara siendo apenas una adolescente.

Aunque no nació en la mayor de las Antillas, sino en New York; aunque sus padres fueron españoles y no cubanos; aunque viajó el orbe y escenarios extranjeros la vieron brillar y muchos en el mundo la sintieron suya; ella será por siempre la Rosa de Cuba, y para su pueblo nunca morirá.

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