Los restos de las últimas nueve víctimas identificadas del accidente aéreo ocurrido en Cuba el pasado 18 de mayo parteron hacia sus lugares de origen, acompañados por sus familiares, para realizar las honras fúnebres.
El Instituto de Medicina Legal comunicó sobre la conclusión de este exhaustivo proceso de identificación de las ciento 10 víctimas inmediatas de la tragedia aérea, a las que se sumaron después dos de las sobrevivientes; que fallecieron esta semana en el Hospital Calixto García, pese al extraordinario empeño de calificados equipos médicos por salvarles la vida.
La única sobreviviente se encuentra en estado crítico, con probabilidad de complicaciones y un pronóstico reservado. Al recibir la información, los familiares expresaron el reconocimiento a Medicina Legal y a todas las autoridades que han garantizado está labor.
El director de esa entidad, Sergio Rabell, dio a conocer los avances del equipo de expertos que trabaja en el reconocimiento de los cuerpos en el contexto de un encuentro de especialistas forenses cubanos y estadounidenses realizado en el Hotel Nacional, de La Habana.
Durante una conferencia de prensa, Rabell comentó que “todo funcionó como un reloj” y se aplicaron los protocolos establecidos para casos de desastres como el ocurrido en la capital cubana.
Según su explicación, fueron muy importantes las labores en lugar de los hechos. Allí se desplegaron cuatro equipos que trabajaron por cuadrícula y barrieron el área.
Esto permitió que se encontraran tantos cuerpos como personas a identificar, además de las pertenencias, dijo el experto, quien recordó que no en todos los desastres de este tipo es posible recuperar la totalidad de los restos.
Rabell también reconoció a las restantes personas relacionadas con la actividad forense que se pusieron a disposición para el trabajo. En las labores participaron, junto a los especialistas del Instituto de Medicina Legal, miembros del Ministerio de Salud Pública y de la Dirección de Criminalística del Ministerio del Interior.
Además, señaló que durante el proceso fue muy importante la ayuda de los familiares de las víctimas.
Esto cierra un capítulo, pero el instituto seguirá dando su aporte, el trabajo de Medicina Legal continuará como parte del proceso de investigaciones sobre la tragedia, en el cual intervienen peritos de distintos sectores, dijo a Prensa Latina.
La aeronave accidentada era un Boeing 737-200 arrendado por Cubana de Aviación a la compañía mexicana Damojh. A bordo viajaban 113 personas, entre ellas 11 extranjeros: seis tripulantes mexicanos, dos turistas argentinos y una mexicana, y dos saharauis residentes en Cuba.
Tres mujeres sobrevivieron a la caída del avión, pero dos de ellas fallecieron luego de varios días de atención médica multidisciplinaria a causa de las severas lesiones sufridas.
La única sobreviviente se encuentra en estado crítico, con probabilidad de complicaciones y un pronóstico reservado.
Licenciada en Español – Literatura. Periodista. Profesora Asistente. Habilitada en guión y realización de programas de TV. Editora del sitio digital de la televisión de la provincia de Guantánamo. Bloguera y activista de las Redes Sociales