Guantánamo.- Los equipos de Granma y Ciego de Ávila saldrán hoy en busca del triunfo que les permitan, a ambas selecciones, incluirse entre las seis que discutirán la segunda fase de la 57 Serie nacional de béisbol.
Los actuales campeones nacionales, Los Alazanes de Grana, las tienen todas consigo para vencer en el duelo a su similar de Villa Clara, y desde las 2 PM, recibirán a sus rivales en su cuartel general, el estadio Mártires de Barbados, de Bayamo.
Aunque los discípulos del director Carlos Martí, no contarán con los servicios de sus dos mejores lanzadores, Lázaro Blanco y Leandro Martínez, están en condiciones de doblegar a sus rivales si el pitcheo de segunda línea, con Yanier González como posible abridor, contiene a la batería de los azucareros.
Por su parte con el madero Granma tiene su mayor fortaleza y lo demostró en el primer desafío al venir de abajo ante el lanzador Freddy Asiel Álvarez, apoyados en el bateo de hombres jóvenes y de talento como Roel y Raico Santos, y el prometedor, Yoelkis Céspedes.
En tanto a Los Azucareros del centro del país no les queda otra alternativa que batear mucho y producir carreras, mientras que disponen de mejor pitcheo para el encuentro de hoy que pudiera marcar la diferencia, y así poder empatar el play off por el comodón ante los granmenses y forzar el tercer y decisivo juego. Esperemos.
La otra subserie entre Ciego de Ávila y Artemisa pinta más favorable a los primeros. No solo por la cómoda victoria en el desafío inicial, 8×2, sino por la mayor experiencia de Los Tigres avileños en este tipo de encuentros. El lanzador derecho, Dachel Duquesne, debe subir al montículo en busca del éxito definitivo en esta etapa.
Así las cosas Granma y Ciego de Ávila deben acompañar a los clasificados directos, Industriales, Las Tunas, Matanzas y Pinar del Río a la siguiente fase de la Serie nacional en busca de los equipos que discutirán el título de esta temporada beisbolera.
Como en los últimos años, los refuerzos que escogerán cada uno de los directores de los seis equipos serán determinantes en las aspiraciones de cada uno de ellos de alzar la corona.