El presidente boliviano, Evo Morales, señaló este sábado que el sistema capitalista es la causa principal de la corrupción en el mundo, al hacer uso de la palabra en la sesión plenaria de la VIII Cumbre de las Américas en Lima, Perú.
“Nuestro deber es discutir temas fundamentales de la vida de nuestros pueblos y la lucha contra la corrupción es uno de esos temas”, inició Morales. “Pero sería superficial y un uso indebido de los recursos públicos decir que debemos coordinar mejor nuestros esfuerzos sin hablar de las causas”.
“El capitalismo es el peor enemigo de la humanidad y del planeta”, dijo el mandatario boliviano, tras explicar que sus crisis no son “coyunturales sino propias del modelo de producción y consumo”.
“En tanto no emprendamos acciones concretas para eliminar paraísos fiscales y pongamos controles fiscales a las empresas trasnacionales, que promueven y fomentan la corrupción y la violación de los derechos humanos; en tanto no se transforme el sistema financiero internacional, en manos de un pequeño grupo de individuos; en tanto no suprimamos el secreto bancario, ni democraticemos el Fondo Monetario Internacional, nada será suficiente”, dijo Evo. “El problema de la corrupción es el capitalismo”.
En otro momento, el mandatario criticó que se intenta criminalizar a los proyectos políticos de cambio. En ese sentido, manifestó su apoyo al expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva.
Morales dijo que la principal amenaza contra la paz, la madre tierra y el multilateralismo es Estados Unidos. “No tengo miedo a decirle de frente”, añadió.
“Washington gasta cientos de miles de millones de dólares en armas de destrucción masiva”, dijo y mencionó el ejemplo de Bolivia que se liberó de la DEA y el Fondo Monetario Internacional y desde entonces ha logrado comenzar a resolver sus propios problemas.
“América Latina no es patio trasero de nadie”, concluyó Evo tras manifestar su rechazo a las sanciones contra Venezuela. Lamentó que el presidente Nicolás Maduro no estuviese presente en la sala.
Asimismo, pidió el fin del bloqueo contra Cuba y que Estados Unidos devuelva el territorio ilegalmente ocupado en Guantánamo.
“No son tiempos de muros, sino de puentes de entendimiento; no son tiempos de invasión; sino de integración”, señaló el jefe de Estado boliviano.
