Guantánamo.- Clases magistrales, conciertos corales vespertinos y nocturnos, homenajes y nuevos espacios abarca el IX Encuentro de Voces de Guantánamo, creado para enaltecer la música vocal, y redimensionado cada año en su afán de ampliarse a todos los géneros de este arte, combinaciones y estilos.
Su anhelo de avivar la participación de cultores de otras regiones del país es un hecho, y sus proyecciones para sumar a la más nueva generación de artistas ya aporta frutos, dijeron los organizadores del evento, al elogiar la actuación de los alumnos de canto coral de la Escuela de Música del territorio, quienes el miércoles abrieron el programa del actual capítulo.
Agrupaciones de prestigio en Cuba, como el santiaguero Coro Madrigalista, asisten a esta edición, dedicada especialmente a ese formato y a los 40 años de vida artística del maestro Conrado Monier, una cátedra de la música, compositor, arreglista y orquestador, cuyas versiones forman parte obligada del repertorio de los orfeones de mayor destaque en la Isla.
La pianista concertista Teresa Manzanares, coordinadora del Encuentro de Voces, auspiciado por la filial de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, subrayó que se busca exaltar el trabajo de la voz humana en sus variadas expresiones dentro de la música, el intercambio entre exponentes, y fomentar en el público el gusto por tan preciado instrumento.
Hizo énfasis en el ascendente potencial de la provincia para el desarrollo de la música vocal, aptitud ya valorada -dijo- por expertos del ámbito, como la virtuosa soprano María Eugenia Barrios, invitada a la cita en 2015.
Manzanares celebró además la permanencia de las clases de técnica vocal en el programa, que las actividades en los últimos años hayan salido de su sede en la Sala de Conciertos para llegar a otras instituciones, culturales y docentes, y la inclusión ahora del espacio De la Trova a lo Coral, novedad que ha sumado a jóvenes cantautores de la Asociación Hermanos Saíz.
El Encuentro de Voces -recordó- rinde perenne tributo a quien es considerada Madre de la Música en Guantánamo, la maestra Antonia Luisa Cabal (1924-2010), que este enero cumpliría 95 años, buena parte de ellos dedicados a las corales infantiles y juveniles, desde donde formó a varias generaciones de artistas.
Los primeros intentos de jornadas de voces fueron organizados por esta pedagoga, y la creación de la actual cita fue también su idea, que no llegó a ver materializada, pero en la cual su obra está siempre presente, en los intérpretes que educó.
Cada año participan aquí solistas y agrupaciones de su cosecha, entre ellos el veterano Coro Masculino, que este jueves alternó escenario con el conjunto Vocal en Serio, de Holguín, y se unirá hoy en la noche a los orfeones santiagueros Madrigalista y Vocal Vidas, para coronar la jornada.
