La nave de exploración radioelectrónica, con la placa ZJ691, partió de la base aérea Akrotiri, en Chipre, efectuó un vuelo de reconocimiento en la costa de Crimea, en el mar Negro, y regresó a su base dos horas después, destaca el portal Plane Radar.
El pasado día 14, la misma nave aérea efectuó un vuelo espía en esa región. Ante tales, acciones, el ministerio ruso de Defensa solicitó a Estados Unidos y otras potencias occidentales suspender esas provocaciones, pero Washington rechazó la petición.
Al comentar los citados vuelos de exploración cerca de Crimea, el titular ruso de Defensa, Serguei Shoigu, advirtió que en esa península se creó una fuerte agrupación militar, capaz de impedir el más mínimo intento de agredir esa región.
En Crimea se encuentra la flota del mar Negro rusa que en cuatro años fue modernizada sustancialmente, mientras se instaló el sistema de defensa costera Bastión y se pusieron en la guardia combativa a varias baterías de los sistemas antiaéreos S-400.