Guantánamo.- Junto a los primeros rayos de sol, despertaban los artistas de la Cruzada teatral Guantánamo- Baracoa. Es momento de alistarse para emprender el rumbo, asumir sus personajes, y enamorar a quienes esperan disfrutar de una inolvidable función.
El camión va hacia el destino fijado, quizás un poco agotador por la distancia y las irregularidades del camino, pero si dudas, el que los guiará hasta sus primeros espectadores de esta nueva aventura en la comunidad rural de Ranchería.
Llegar allí es mucho más que hacer teatro en contacto directo con la naturaleza, puesto que en ese recóndito paraje, ubicado en el Consejo Popular de La Caridad de los indios, municipio Manuel Tames, se disfruta del encanto primigenio de las poblaciones aborígenes de Cuba. Hoy, con una treintena de habitantes.
El arribo estuvo marcado por mucho lluvia en la comunidad de Ranchería fue lluvioso, pero el recibimiento de los Ramírez Rojas fue caluroso debido a su felicidad.
De la mano del grupo de narración oral La Barca llegaron Poemas con Niños, y un canto a la igualdad, a lo que los residentes respondieron con la bendición de la ceremonia de la luna y el sol.
Horas más tarde el arte se trasladó hasta la Casa de la Cultura Reutilio Domínguez, en el poblado de Manuel Tames.
Licenciada en Periodismo. Graduada en la Universidad de Oriente en el 2010. Periodista, editora del sitio web y miembro del equipo multimedia de Solvisión.