COVID-19: la irresponsabilidad de algunos, no nos puede convertir en el próximo número ( + Post)

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Guantánamo.- Recuerdo cuando apareció la Covid-19. Los reportes llegaban desde la alejada China entonces anunciaban la construcción de hospitales en pocos días para lidiar la enfermedad siempre con la ilusión de que se esfumara rápidamente. Sin embargo, progresó rápido y se convirtió en un enemigo silencioso, solo visible tras una diminuta mirada, pero ya cobra vida hasta hoy en 183, entre ellos, Cuba.

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Hace más de un mes, en nuestro país luchamos contra esta pandemia. En este momento nos preparamos para enfrentar la etapa más compleja de un mal que no cree en edad, sexo, creencias religiosas y que, en lo esencial, ataca a los grupos de personas vulnerables. Por eso el cómo protegernos seguirá siendo lo más importante para nosotros.

El aislamiento social y la baja percepción de riesgo, son aspectos trascendentales para enfrentarla. Como he dicho en varias ocasiones, esta enfermedad, no es jueguito de muchachos, por eso, todo lo que hagas ahora redundará en el beneficio de todos, porque esta etapa exige responsabilidad ciudadana.

Y no se trata de sembrar el terror, sino de evaluar la magnitud de esta pandemia, solo así cortaríamos el virus y la entrada a nuestros hogares… No podemos negar lo doloroso de ver que, detrás de las cifras de los contagiados, hay un menor, un anciano, un padre de familia, una madre amorosa, un abuelito que no estará más. 

El distanciamiento social, los estados de emergencia y las cuarentenas son esenciales en la lucha por “aplanar la curva” de contagio en todo el mundo. Conservemos una postura segura para calmar la transmisión de la enfermedad y tomemos de la mano la trilogía exigida por las autoridades cubanas: “aislamiento social, quédate en casa y cuida a tu familia”.

Vivimos tiempos donde es vital la unidad y la solidaridad, por ello, tenemos que ser disciplinados. Es momento para dejar a un lado la pasadera de pañitos tibios, y aplicar las sanciones correspondientes a quienes incumplen con las orientaciones del Gobierno Cubano y el Ministerio de Salud Pública.

Quédate en casa es la única medicina preventiva que tienes a tu alcance y la mejor manera de protegernos, por ello, no abras la puerta al enemigo, cuídate por ti, por tu vida, por tu familia. Cuídate, además, por quienes desafían diariamente esta terrible pandemia desde sus puestos laborales.

Dale calor a tu hogar, atrinchérate, vístete con el traje de solidaridad y responsabilidad. Quedarse en casa es ganarle a la COVID-19, que solo acabará con el apoyo y la protección de todos. Cuídate, cuídanos, la irresponsabilidad de algunos, no nos puede convertir en el próximo número.

 

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