COVID-19 en el mundo: La OMS advierte que nacionalismo por las vacunas prolongará la pandemia

“El nacionalismo por la vacuna prolongará la pandemia”, declaró este viernes el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, durante una reunión informativa con la prensa. La OMS no espera una vacunación difundida a nivel internacional hasta mediados de 2021.

Tedros pidió a los países de todo el mundo que unan sus fuerzas para hacer frente al coronavirus, diciendo que el “nacionalismo por las vacunas” solo frenará la respuesta a la pandemia, aunque no mencionó ninguna nación en particular.

La OMS y la alianza de vacunas de GAVI lideran un plan de asignación de vacunas para el mundo conocido como COVAX, cuyo objetivo es ayudar a comprar y distribuir equitativamente las vacunas, pero algunos países han asegurado sus propios suministros a través de acuerdos bilaterales, incluido Estados Unidos, y han dicho que no se unirán a COVAX.

Este mismo viernes, la vocera de la OMS, Margaret Harris, declaró que esa organización no espera “una vacunación difundida o masiva hasta la mitad del año próximo”.

La idea –según adelantó el asesor principal de la OMS, Bruce Aylward– es vacunar antes de ese plazo a los grupos de mayor riesgo, principalmente los trabajadores sanitarios.

En la lista de prioridades seguirían las personas mayores y aquellas que padecen de enfermedades crónicas.

Aunque frente a la urgencia el plazo parezca lejano, los países ya deben empezar a planificar como realizarán sus campañas de vacunación contra la COVID-19 y las necesidades que tendrán en términos de personal capacitado, equipamientos y logística.

“De esta manera, se podrán asegurar de que una vez que la vacuna esté disponible no haya demora en lanzar los programas de inmunización” dijo la científica en jefe de la OMS, Soumya Swaminathan.

“Esta fase 3 requiere más tiempo, porque debemos ver qué tan protectora y segura es una vacuna”, afirmó en referencia a los estudios clínicos en curso que se siguen con unos 30 candidatos vacunales en varios países.

La fase 3 de los ensayos clínicos es la última y más importante en el desarrollo de una vacuna, involucra a decenas de miles de personas y es la que permite ver realmente si una vacuna funciona.

“A los voluntarios hay que darles una dosis y después hay que dejar pasar entre dos y cuatro semanas para que reciban la segunda, y mientras se recluta a toda esa gente pueden pasar tres meses o más”, explicó Aylward.

Luego “hay que entender quién está protegido y quién no (la mitad de voluntarios recibe dosis de placebo y la otra mitad la verdadera vacuna), y en este punto dependemos de la epidemia y en qué medida el virus está circulando en el lugar del ensayo”, indicó.

Hacer esa observación toma al menos dos meses adicionales, sin contar los procedimientos administrativos de autorización, agregó.

Tedros también garantizó este viernes que la OMS no avalará ninguna vacuna experimental sin que haya un convencimiento total de que es segura y eficaz para prevenir la COVID-19.

“Le aseguro al mundo que la OMS solo dará su respaldo a una vacuna segura y eficaz”, dijo.

Actualmente, y ante el avance de la pandemia que ha causado 26.1 millones de casos a nivel mundial, muchas esperanzas están puestas en el desarrollo de una o más vacunas, pero estas conviven con un movimiento antivacunas que ahora está centrado en generar miedo y confusión en torno a ese medio de inmunización.

Tedros recordó que las vacunas han ayudado a erradicar en las últimas décadas enfermedades que causaban millones de muertes, como la viruela, y contenido de forma muy efectiva otras que afectan sobre todo a los niños, como el sarampión y la poliomielitis (a punto también de ser erradicada).

Más recientemente, fue gracias a una vacuna experimental que se logró detener la epidemia de ébola en la región oriental de la República Democrática del Congo, donde la situación era sumamente difícil por tratarse de una zona convulsionada por un conflicto armado.

“Para entender el poder de las vacunas es mejor ver el historial de las vacunas utilizadas en las últimas décadas”, afirmó el director general de la OMS.

“El movimiento antivacunas puede construir una narrativa, pero los antecedentes (de las vacunas) cuentan la verdadera historia. La gente no debe dejarse confundir sin informarse sobre cómo fueron utilizadas para salvar la vida de niños y erradicar peligrosas enfermedades”, advirtió.

EEUU podría cerrar 2020 con más de 400 000 muertos por COVID-19

Más de 410 000 personas podrían morir en Estados Unidos por causa del coronavirus hasta enero próximo, lo que representa más del doble del número actual de muertos, de acuerdo con un nuevo modelo divulgado este viernes.

La cifra representa que otras 224 000 vidas se perderían debido a la pandemia en los Estados Unidos durante los próximos cuatro meses.

Según el modelo del Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington, el uso casi universal de mascarillas podría reducir el número de muertes.

La institución advirtió que la cifra acumulada de muertos podría ser mucho mayor para el nuevo año si se alivian todas las restricciones vigentes.

El modelo prevé que el empeoramiento de los brotes en el hemisferio norte provocará 1.9 millones más de muertes por coronavirus en 2020, a menos que los Gobiernos actúen.

La obligatoriedad de usar mascarillas y el distanciamiento social podrían salvar cientos de miles de vidas, pero hay “una tremenda cantidad de fatiga por COVID” entre los Gobiernos del mundo debido a los efectos económicos adversos, dijo el doctor Christopher Murray, del Instituto de Métrica y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington.

La mayoría de la población mundial vive en el hemisferio norte. Las enfermedades respiratorias tienden a llegar a su punto máximo en los meses de invierno, un efecto estacional que se prevé será válido también para la COVID-19, dijo Murray.

Compañía alemana recibe fondos estatales para desarrollar vacuna

La compañía farmacéutica alemana CureVac recibirá un fondo adicional de 252 millones de euros (298 millones de dólares) del Estado para desarrollar una vacuna contra el coronavirus.

La compañía informó este viernes que su pedido de fondos adicionales fue aprobado por el Ministerio de Educación e Investigaciones, siempre que se cumplan ciertas metas.

El banco estatal alemán KfW bank ya adquirió una participación de 23% en CureVac por 300 millones de euros.

La compañía lanzó una oferta pública inicial de acciones, pero su principal accionista sigue siendo Dietmar Hopp, co-fundador del gigante de software SAP.

CureVac es una de las compañías que buscan crear una vacuna para la COVID-19 usando tecnología mRNA, que expertos dicen pudiera permitir inoculación rápida a una escala mayor que las formas tradicionales de vacunación.

Tomado de Cubadebate

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *