Guantánamo.- Mientras los países de la región seguían los acontecimientos relacionados con la renuncia de Pedro Pablo Kuczynski como presidente de Perú, otro suceso acaparaba igualmente la atención; el Diálogo Hemisférico como parte del proceso preparatorio para la VIII Cumbre de las Américas prevista para el 13 y 14 de abril en la capital de la nación andina.
En Lima, los voceros de las 28 coaliciones temáticas aprobadas para ese evento tenían cuatro minutos para exponer sus posiciones ante enviados especiales de los gobiernos participantes.
El embajador cubano en ese país, Juan Antonio Fernández, ya había denunciado la composición de la coalición 26, que tiene entre sus coordinadores “a personas y organizaciones de dudosa trayectoria y con una agenda política de provocaciones y subversión”.
Y fue precisamente durante la intervención de José Luis Vallejo, representante de la denominada Red Latinoamericana de Jóvenes por la Democracia, afín a los Estados Unidos, cuando el diplomático cubano expresó una contundente frase que frenó la verborrea del portavoz: “¡Con Cuba no te metas, payasadas en Cuba no habrá! ¡No vas a ir en ese talante! ¡Basta de provocaciones y ajústate a lo que tengas que decir…!”
En franca provocación, Vallejo insinuó la posibilidad de visitar la isla para realizar actividades con grupos ilegales y carentes de representatividad; ante la enérgica intervención de Fernández no le quedó otra opción que cambiar de tema…
De otro lado, la vicepresidenta de la Unión Nacional de Juristas de Cuba, Yamila González, participó como vocera de la coalición número 15, dedicada al tema “Por un diálogo inclusivo y respetuoso” y denunció las pretensiones de dar legitimidad a quienes no representan a la sociedad civil.
La joven cubana reveló que la coalición número 26, sobre “Juventud y Derechos Humanos frente a la Corrupción y Transparencia en las Américas”, tiene como coordinadora, designada por los organizadores, a una de esos elementos, Rosa María Payá, símbolo de anexionismo yanqui.
Paralelo al encuentro en Lima, los cerca de 200 miembros de la sociedad civil de nuestro país, reunidos en La Habana en el II Foro “Pensando Américas”, seguían en vivo el desarrollo del Diálogo Hemisférico y no se hizo esperar el espontáneo e irrestricto apoyo a la posición de nuestros representantes de la isla en ese escenario.
La cita sirvió para trazar una hoja de ruta previa a las actividades de la VIII Cumbre y fue consenso entre los delegados destacar que Cuba, sin ser una sociedad perfecta, tiene muchos éxitos que mostrar a sus semejantes del continente.
La Mayor de las Antillas asistió por primera vez a las Cumbres de las Américas en su séptima edición, celebrada en Panamá en abril del 2015. Su inclusión fue un reclamo de América Latina y el Caribe que evidenció el aislamiento de la política agresiva de Washington, donde surgió la idea de estos encuentros en 1994.
La delegación cubana va fortalecida a Lima y podrá dar respuestas oportunas a cualquier provocación contrarrevolucionaria o intento de legitimar a quienes no tienen ningún valor moral para representar a nuestro pueblo.
La historia de este evento regional contada a través de una línea de tiempo
*(La de este año está pendiente por definir quien será el presidente del país anfitrión, luego de la renuncia de Pedro Pablo Kuczynski)
