Guantánamo.- Como “evento no típico” definió Miguel Díaz-Canel Bermúdez, presidente de la República, a las intensas lluvias de los últimos días, que dejaron serias afectaciones en la región oriental del país, desde Camagüey hasta Santiago de Cuba, cobrando la vida de seis personas, además de cuantiosos daños materiales.
Así lo refirió durante el chequeo de las acciones de recuperación, realizado a través de videoconferencia con las principales autoridades políticas y gubernamentales de las provincias afectadas.
También comentó que durante las lluvias, hubo sitios donde la inundación alcanzó niveles nunca vistos en las últimas tres décadas, e incluso, en no pocos lugares los habitantes cuentan que es la primera vez que el agua llega a esas alturas, sobre todo, tras una sequía extrema.
“Yara, Jiguaní, Manzanillo, Media Luna y Niquero fueron los territorios más afectados, mientras que unas 105 comunidades quedaron aisladas, de ellas, 14 por deslizamientos de tierra, y 91 por crecidas de ríos, con una población de 18 mil 585 personas.
En ese sentido, indicó como tareas inmediatas, estudiar todo lo ocurrido, y actualizar los planes de reducción de desastres para fuertes e intensas lluvias. Asimismo, encomendó a las autoridades de la Construcción y el Transporte a hacer un levantamiento, y buscar soluciones para responder a la afectación que hay en viales y líneas férreas.
Asimismo, reconoció el esfuerzo de los dirigentes en cada territorio, y el de las tropas del Ministerio del Interior y las Fuerzas Armadas Revolucionarias, en el rescate de personas durante las inundaciones.
Díaz-Canel informó que ya se ha recibido la disposición de Venezuela y del sistema de organizaciones de Naciones Unidas que están en la isla, para apoyar en la recuperación.
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