Guantánamo (Redacción Solvisión).- El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, aseguró durante su intervención en la la XVII Cumbre del Movimiento de Países No Alineados que la mayoría de los principios de esa organización, adoptados en la cita de La Habana del 2006, «se incumplen de manera sistemática».
«El respeto a la soberanía de los pueblos y a su autodeterminación e igualdad de derechos soberanos no solo sigue sin alcanzarse, sino los hechos que vulneran esos preceptos fundamentales se agravan cada día», afirmó al intervenir en el segmento de Cancilleres de ese foro que tiene lugar en Islas Margarita, Venezuela.
El titular expuso su preocupación de que no se haya alcanzado la paz, seguridad internacional y cooperación a la que se aspira.
«La guerra, la agresión, los golpes blandos y los intentos de cambio de régimen son una constante», afirmó al ejemplificar con los intentos de desestabilización contra el gobierno constitucional de Venezuela.
Reiteró al respecto «toda la solidaridad de Cuba con la Revolución Bolivariana que lucha, con su presidente legítimo Nicolás Maduro Moros y con la Unión Cívico Militar de su pueblo».
El Canciller cubano afirmó igualmente que en la Declaración de La Habana se preceptuaba la abstención de todo país de ejercer presiones o coacción sobre otros países, incluida la aplicación y/o fomento de cualquier medida unilateral de carácter coercitivo, contraria al derecho internacional.
«El bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba todavía persiste, daña al pueblo cubano y es la negación misma de dicho principio», afirmó en ese sentido.
HEMOS LOGRADO PRESERVAR EL MNOAL
Aunque no se han logrado los principales objetivos de lo pactado en la cumbre del año 2006, se ha logrado preservar el Movimiento de Países No Alineados, «a pesar de las voces que auguraron su desaparición».
Sin embargo, comentó el titular, «ahora corresponde trabajar con más ahínco para cumplir el principio de potenciar la solidaridad como fundamento de las relaciones y la actuación entre todos sus miembros en cualquier circunstancia, en defensa de la soberanía y el derecho internacional aun cuando entrañe una confrontación abierta con los intereses y pretensiones hegemónicas de las grandes potencias».
El Ministro de Relaciones Exteriores cubano rememoró la coyuntura histórica que signó los orígenes del Movimiento en la cita de Bandung y luego en Belgrado.
Eran momentos en que los países del Sur necesitaban de una agrupación profundamente anticolonialista, antimperialista y antirracista, defensora de la soberanía y autodeterminación de los pueblos, de la justicia y el derecho internacional, a favor de la solución pacífica de los conflictos y del desarme general y completo, aseguró.
Enfatizó, en ese sentido, que era una época marcada por un proceso de descolonización que dio lugar a nuevos Estados independientes; así como al recrudecimiento de la confrontación Este-Oeste.
Todo ello, aseguró, impulsó la definición de las relaciones entre los países poderosos y los menos desarrollados sobre la base del respeto a los principios de la Carta de las Naciones, la no injerencia en los asuntos internos y otros asuntos.
«Si bien los postulados de Bandung y Belgrado siguen siendo totalmente válidos, vivimos en un mundo radicalmente diferente», sostuvo frente a los participantes de la cita de Cancilleres de la Cumbre.
Al inicio de su discurso saludó la labor de la presidencia iraní al frente del MNOAL la cual se realizó «en medio de un complejo escenario internacional».
En otro momento de su intervención reiteró la confianza y el apoyo de Cuba a la Presidencia Pro Témpore venezolana del Movimiento que agrupa 120 naciones del orbe. Dijo al respecto que bajo la dirección del país sudamericano «se continuará profundizando el papel del Movimiento en la arena internacional sobre la base de los principios de Bandung y de la Declaración de La Habana».
Rodríguez Parrilla culminó subrayando la necesidad de tener un mundo de paz, libre de armas nucleares y en el que todos tengan acceso a la alimentación, la salud, la educación.
«Un mundo sano y sostenible que garantice a las futuras generaciones vivir en armonía con el medio ambiente y con sus vecinos», afirmó haciendo referencia a la proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, adoptada en la 2da. Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
En la XVII Cumbre del MNOAL, que concluirá este fin de semana con la etapa de jefes de Estado y la aprobación de la Declaración de Margarita, Venezuela asume la Presidencia rotativa del organismo, con el mandato de promover los principios fundacionales en defensa de la paz y la soberanía, tal y como han sostenido las autoridades bolivarianas.