Guantánamo (Redacción Solvisión).- El ministro cubano de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez Parrilla, destacó en Venezuela la trascendencia actual del Movimiento de Países No Alineados, cuya XVII Cumbre sesiona hasta el venidero 18 de septiembre en Isla Margarita.
«La no alineación tiene enormes méritos históricos, pero también total vigencia», dijo a su llegada a este territorio insular, y al referirse a los temas que centrarán los debates de la cita multinacional agregó que «hay que defender la independencia, la soberanía y la autodeterminación, mediante la unidad y la concertación».
«Un abrazo revolucionario, antimperialista y solidario al bravo pueblo», enfatizó en su saludo, y deseó buenos augurios al mandato del Movimiento que la República Bolivariana asumirá en la Cumbre: «Venezuela recibirá la presidencia y lo hará de manera exitosa. Será una victoria del pueblo venezolano».
Bruno Rodríguez participará hoy y mañana en el debate político que constituirá el Encuentro de Cancilleres bajo el lema Paz, soberanía e independencia, un segmento que precederá la Conferencia de Jefes de Estado concebida para sábado y domingo.
La segunda jornada de la Cumbre cerró las sesiones de las Reuniones de Altos Funcionarios en las que se elaboró el documento base que discutirán y aprobarán cancilleres y mandatarios.
En tales reuniones se eligió a Venezuela como coordinadora de las comisiones política, económica y social del Movimiento, un aspecto que, junto a la participación masiva de delegados visitantes, la canciller anfitriona Delcy Rodríguez exaltó como elementos de reconocimiento a la diplomacia de paz que promueve su país, y desmantelan los intentos de la derecha por aislarlo.
«Aquellas transnacionales de la comunicación que pretendieron invisibilizar a Venezuela para que no se llevara a cabo esta Cumbre han sido derrotadas hoy, con la presencia masiva de todas las delegaciones de los Países No Alineados», afirmó.
Mediante su cuenta de Twitter, Rodríguez también hizo la denuncia de una componenda de la alianza derechista de Brasil, Paraguay y Argentina, cuyos gobiernos suscribieron declaraciones que otra vez cuestionan la legitimidad de Venezuela al frente de Mercosur; en lo que puede considerarse un intento oportunista de desacreditar al gobierno bolivariano en medio del escenario de la Cumbre del MNOAL.