
Por: Julio César Cuba Labaut
Guantánamo.- A pesar de limitaciones de cemento y acero más de 200 familias guantanameras asentadas en zonas de Plan Turquino fueron beneficiadas en el decurso del año con la entrega de viviendas que combinan en su construcción mampostería y madera en las paredes, cubierta de zinc y piso de cemento pulido.
Los inmuebles, de tipología III, cuentan indistintamente con dos o tres habitaciones, comedor, cocina, sala, baño y portal, y fueron erigidas por sus propios dueños con la contribución de entidades estatales que garantizan parte de los recursos.
Hortensio Romero Rivero, funcionario a cargo del Programa estatal de Construcción de Viviendas en Guantánamo, apuntó que el ahorro de recursos y la fabricación de materiales aprovechando las potencialidades de cada municipio, son ventajas de la alternativa inversionista, dirigida también a estabilizar la fuerza laboral y estimular la producción de alimentos en las montañas.
El cambio de uso y traspaso de locales, autorizados por acuerdo del Consejo de Ministros, es otra vertiente para la solución habitacional de numerosas familias, refirió y aseguró que ambas variantes permitieron terminar 300 viviendas.
Subrayó que la escasez de recursos conspiró también contra el plan de viviendas subsidiadas, prioritarias en la provincia, de las cuales se erigieron solo 100 de las mil 49 previstas.
Romero Rivero comentó que fue insuficiente lo hecho en el Programa de rehabilitación de viviendas y otros inmuebles, fundamentalmente en edificios (existen más de mil en el territorio), por falta de elementos de carpintería, mantas para impermeabilizar cubiertas y líneas hidrosanitarias, entre otros.