El presidente palestino, Mahmud Abas, fue uno de los primeros en reaccionar a esta medida.
Mediante estas decisiones lamentables, Estados Unidos boicotea deliberadamente todos los esfuerzos de paz y proclama que abandona el papel de patrocinador del proceso de paz que ejerció en las últimas décadas, declaró.
Por su parte, el secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Saeb Erakat, declaró que Trump había destruido la llamada solución de dos Estados.
Hamas, el grupo radical palestino, consideró que la decisión del presidente estadounidense ‘abrió las puertas del infierno’ y convocó a una nueva Intifada (rebelión) que comenzará, según su líder, este mismo viernes.
Ismael Raduan, alto responsable de Hamas, hizo un llamado a los países árabes y musulmanes a cortar los lazos políticos y económicos con las embajadas estadounidenses y a expulsar a los embajadores de Washington.