Guantánamo.- La Terminal de Contenedores Mariel estima terminar este año con un tráfico de alrededor de 300 000 TEUs –unidad de medida equivalente a un contenedor de 20 pies, cifra que se aproxima a las alcanzadas antes de la pandemia de la Covid-19.
José Leonardo Sosa Barrios, director adjunto de la instalación, destacó la importancia que ha tenido el incremento de las mercancías contenerizadas, la capacidad refrigerada de la terminal de 1 140 tomas, y el crecimiento de los trasbordos internacionales.
En cuanto a infraestructura, la Terminal tiene capacidad para unos 800 000 TEUs, aunque en su Máster Plan está concebida una capacidad total de tres millones de TEUs, con 24 grúas Súper Post Panamax.
Martín José Spini, director general de la Terminal, refirió que la infraestructura es de las más modernas de la región, con una posición ideal para servir como puerto de trasbordo y primer puerto de escala en los servicios de Asia y los puertos del Golfo de México y del Caribe.
Informó sobre la conclusión, en diciembre, del canal de acceso que permitirá a la Terminal, primer usuario de la Zona Especial de Desarrollo Mariel, recibir buques Neopanamax de hasta 366 metros de eslora (largo), 52 de manga (ancho) y 15 de calado (la parte bajo el agua).
José Carlos López, director de la unidad básica inversionista de actividades logísticas, explicó que el dragado del canal se realizó en tres etapas de construcción, que incluyó estudios biológicos, de impacto ambiental y proyectos técnico-ejecutivos, tareas que se ejecutaron en su totalidad con la empresa GeoCuba Estudios Marinos.
El Director General de la Terminal, recordó que la extraterritorial Ley Torricelli, parte del andamiaje del bloqueo económico, comercial y financiero contra Cuba, es una limitante para que los buques que toquen puerto cubano puedan volver a hacerlo en los de Estados Unidos, lo cual les troncha la posibilidad, en un corto plazo, de efectuar trasbordos.
Sin embargo, destacó, se pueden realizar servicios a buques que transitan por el Caribe, con destino a otros puertos de la región, incluso, Asia o el norte de Europa, con la ventaja de reducir los tiempos de tránsito y de costo de flete.
Tomado de Cubadebate
