Guantánamo (Redacción Solvisión) La aeronáutica civil es el sector del transporte más afectado por el bloqueo económico, financiero y comercial de Estados Unidos contra Cuba, considerado el genocidio más largo de la historia a pueblo alguno.
Solo en el último año, los daños en este campo superaron los 288 millones de dólares, sobre todo por el hecho de que las empresas nacionales no pueden operar en ese país y tampoco sus líneas aéreas pueden sobrevolar el territorio norteamericano por rutas directas y más económicas.
Incluso, las leyes anticubanas prohíben la adquisición en esa nación de tecnologías de avanzada, equipos, partes, piezas y otros accesorios, denunció también un voluminoso y detallado informe de Cuba, dado a conocer en La Habana, sobre las consecuencias de la persistencia del cruel e injusto cerco contra la Isla.
Reveló que la Empresa Cubana de Aviación no puede acceder a los sistemas computadorizados de distribución de Reservas Aéreas, al ser estos en su mayoría de propiedad o con intereses estadounidenses.
Llamó la atención de que la misma entidad no puede comprar en EE.UU. ni dar mantenimiento a equipos de emergencia instalados en aeronaves de la Isla, debido a que son fabricados por la firma Air Cruisers Company.
Pero la creciente agresividad de tales administraciones daña asimismo a la infraestructura hidráulica de la nación, porque deben solicitarse créditos de un año de amortización y con elevados intereses con el propósito de adquirir al polietileno de alta densidad para la fabricación local de tuberías.
En noviembre de 2014, la empresa española Sterling SIHI comunicó al Grupo BM, proveedor de la entidad Cubahidráulica, la cancelación de 15 bombas por las regulaciones de la guerra económica generalizada contra Cuba.
Hasta el cloro comprado a una empresa colombiana tuvo que ser trasladado a La Habana mediante un tercer país por temor a posibles sanciones y represalias de USA.
En el caso del níquel, una de las principales exportaciones de bienes de la Isla, continuó la prohibición de la importación de EE.UU. de todo producto elaborado total o parcialmente con esa materia prima, aunque sea producido en terceros países.
Una situación parecida sostiene el Instituto de Medicina Deportiva, impedido o con dificultades para el suministro de reactivos de su Laboratorio Antidoping y piezas de repuesto para la reparación de cromatógrafos y de un Espectrómetro de Masa, de la firma Agilent Technologies.
La institución deportiva cubana enfrenta, asimismo, carencias de anticuerpos monoclonales para la determinación de la Eritropoyetina humana (hormona generada por el riñón), únicamente producidos por compañías norteamericanas, así como nutrientes y recuperantes para los atletas.
A su vez, el grupo de transporte para el turismo, TRANSTUR, estimó daños superiores a los 207 mil dólares por procurarse en mercados lejanos equipos, partes, piezas y agregados automores.
Licenciada en Español – Literatura. Periodista. Profesora Asistente. Habilitada en guión y realización de programas de TV. Editora del sitio digital de la televisión de la provincia de Guantánamo. Bloguera y activista de las Redes Sociales