Apuestan industria cárnica y pesquera de Guantánamo por multiplicar sus producciones

Guantánamo.- Insuficientes resultan los surtidos que ofertan hoy, de manera liberada a la población, las Unidades Empresarial de Base (UEB) pertenecientes al Combinado Cárnico de Guantánamo.

A la obsolescencia de una industria con más de cuatro décadas de explotación se suman las carencias en de la materia prima, por lo que se priorizan los productos destinados a la canasta básica para su distribución normada.

Sin embargo José Orozco Bonne, Director de esa entidad, explicó que el principal objeto social de estas instituciones son hoy las producciones destinadas a la canasta básica entre ellas, las carnes en conserva – picadillo o embutido- pollo y carne de res – para dieta médica y menores de seis años -.

“También estamos enfrascados en la atención a centros de aislamento, instituciones sanitarios, hogares maternos y de las embarazadas así como la producción de productos liberados para su venta en los mercados ideales, tampoco descuidamos a los organismos priorizados que no pueden detener su  quehacer, en el enfrentamiento a la pandemia.”

El director de la industria cárnica informó que en lo que va de año han enfrentado dificultades en la materia prima, sobre todo la carne de cerdo y de res, por eso trabajamos en la misma medida que entra. A veces tenenos jornadas continuas, hasta de madrugada, para cumplir con nuestros compromisos, por ejemplo, los planes de embutidos de sangre y las croquetas – en masa y conformada –  que  se distribuyen en todos los mercados del territorio.”

A tenor de la disponibilidad de materia prima, para el mes de mayo se distribuirá embutido para la canasta básica, un producto con buena aceptación por parte de la población.

La industrian pesquera también se encarga de garantizar las dietas médicas que incluyen pescado e incrementar las producciones para la venta liberadas con una mayor presencia de croquetas y embutidos. Así lo explicó Enerledis Castillo. Director de Pescaguan:   “De 25 toneladas previstas en el plan para el mes de abril, logramos duplicarlo y pudimos obtener la materia prima, para llegar con nuestros surtidos a un mayor número de clientes. Hoy poseemos  15 pescaderías, ocho en el municipio cabecera  y tenemos presencia en El Salvador, Niceto Pérez, Baracoa y Caimanera.

Con una tonelada de claria se le vende a la población 500 kilogramos, pero convertida en picadillo pueden sacarse 1.3 toneladas de productos conformados. Además, al no haber importación estamos sustituyendo la masa deshuesada mecánicamente, de importación, con el picadillo de pescado para elaborar algunos de nuestros productos.”

Ello implica jornadas laborales extra, sin descuidar la seguridad de los trabajadores de la industria y cumpliendo con todas las medidas sanitarias que ya formaban parte del proceso productivo para garantizar la inocuidad de los alimentos.

Sobre la ampliación de las capacidades productivas Castillo precisó: “En Baracoa y Caimanera se han establecido dos pequeños centros de elaboración, para reforzar la estructura existente en esos territorios y por primera vez,  se elabora de forma  artesanal la croqueta, con una alta demanda y aceptación de la población.

“El mes de mayo debe ser mejor para nuestras producciones, pues estamos recuperando varias hectáreas de la UEB Acuícola, visitada hace pocos días por las  autoridades políticas y gubernamentales, con el objetivo de impulsar la producción.”

Producir, innovar y sobreponerse a las constantes dificultades que se presentan  en el camino de las industrias alimentarias de Guantánamo,  es una deuda pendiente y no solo en tiempos de pademia. Se impone  lograr estabilidad en las propuestas, para que satisfaga la demanda de la población del más oriental de los territorios cubanos.

 

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