Agencia de ONU destina ayuda millonaria a recuperación en el Caribe

El portavoz del secretario general de la ONU, Stéphane Dujarric, informó que el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) movilizó 25 millones de dólares para Dominica y Antigua y Barbuda, afectadas por huracanes.
Según dijo el vocero, este financiamiento está dirigido a aumentar la resiliencia y restaurar más de 800 edificios para las personas más vulnerables en ambos países, muy dañados por dos poderosos huracanes consecutivos el año pasado.

El PNUD se asoció con los gobiernos, el sector privado y otros organismos de la ONU para instalar techos más fuertes en las viviendas y se capacitó a casi mil contratistas en técnicas de construcción más resistentes.

La contribución de los organismos de la ONU también posibilitó la recogida y reciclaje de toneladas de escombros, lo cual permitió la recuperación de caminos y otros sitios importantes.

Justo la semana anterior, el secretario general de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), Petteri Taalas, alertó sobre los daños económicos ocasionados por fenómenos climáticos extremos en el Caribe, mientras se vislumbra otra activa temporada de huracanes en la región.

El año pasado fue en el que mayores pérdidas y daños económicos se reportaron debido a eventos climáticos extremos, dijo a la prensa en la sede de la ONU y destacó la destrucción ocasionada en el Caribe por los huracanes.

Ante una pregunta de Prensa Latina, se refirió a la necesidad de mejorar la infraestructura en esa región para hacerla más sólida y duradera ante tales fenómenos.

En el Caribe hay que construir edificios que resistan los vientos fuertes, mejorar los servicios de alerta temprana y la capacidad de respuesta ante los huracanes, apuntó Taalas.

Además de la mitigación del cambio climático, tenemos que prestar atención a la adaptación a esas transformaciones, señaló el secretario general de la OMM.

Pero no se trata solo de una respuesta regional, recalcó, es necesario una acción de todos los actores internacionales para enfrentar ese flagelo y sus consecuencias en las próximas decadas.

 

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