Guantánamo.- Desde su puesta en marcha en mayo de este año, considerables resultados exhibe la desfibradora de coco instalada en el municipio de Baracoa, industria nacida de un proyecto de colaboración y de la iniciativa para el desarrollo local que con un valor superior a los 68 mil 400 dólares, forma parte del programa del encadenamiento productivo del también conocido árbol de los cien usos que se instrumenta progresivamente en Guantánamo.
La fábrica perteneciente a la Industria locales Varias de la más oriental de las provincias de Cuba está equipada con tecnología china y tiene capacidad para producir 1, 5 toneladas de fibra de coco, producto con una amplia gama de aplicaciones, en la industria automotriz, la colchonera y la tapicera, en la agricultura y la rama artesanal.
De la industria sale también el sustrato de coco que se obtiene de moler la estopa o bonote del fruto, el cual puede ser procesado para utilizarlo como abono orgánico, de alta demanda en el mercado internacional.
La envergadura de la inversión abarcó tres naves dedicadas al acopio y beneficio, una segunda donde está la planta desfibradora y la tercera para el almacén.
Junto a la desfibradora la Empresa Industria Locales también se inserta en el programa de encadenamiento productivo del coco con la fabricación de objetos de artesanía y separadores a partir de la dura madera del cocotero.
Grandes beneficios ecológicos y sociales proporcionan la desfibradora pues se estima que en la actualidad más de 2 mil 800 toneladas de la cascara del coco se desechan anualmente, provocando daños medioambientales como la degradación de los suelos. La entidad también brinda nuevos empleos a pobladores de la comunidad y por consiguiente mejora los ingresos familiares.
