El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados pidió hoy a los 28 la búsqueda de un enfoque más efectivo y solidario ante la actual crisis migratoria.
Asimismo, instó a los miembros de la Unión Europea (UE) a tomar las medidas necesarias para garantizar la adecuada recepción de los refugiados y abogó por la implementación de vías legales de migración.
Por su parte, el papa Francisco advirtió que ese fenómeno es solo “la punta del iceberg” y su principal causa es la existencia de “un sistema socioeconómico malo e injusto”.
El Sumo Pontífice destacó, además, la necesidad de ser hospitalarios con quienes huyen de la guerra, el hambre y la miseria.
Esta jornada se celebró en Bruselas una reunión extraordinaria de los ministros de Interior del bloque comunitario para analizar posibles medidas ante la crisis como el reparto de 160 mil indocumentados entre todos los Estados miembros.
Los 28 han celebrado varios encuentros sobre el tema, pero continúan sin ponerse de acuerdo, mientras miles de migrantes intentan cada día llegar a países como Alemania y Austria.
Mientras la UE continúa la búsqueda de una respuesta, algunos de los integrantes del bloque anunciaron la implementación de sus propias iniciativas.
Esta jornada, medios húngaros de prensa comunicaron el reforzamiento de la seguridad en la frontera con Serbia, donde Budapest ordenó levantar una valla de 175 kilómetros para evitar el paso de los refugiados.
Además, a partir de mañana entrarán en vigor normativas aprobadas por el parlamento magiar para recrudecer las penas por la migración ilegal.
Por su parte, países como Alemania y Austria anunciaron el fortalecimiento de los controles en puntos fronterizos ante el creciente flujo de indocumentados y tras conocerse que Hungría dejó de registrar a los migrantes y les permite viajar en tren a esas naciones.
