Baracoa, Guantánamo.– El museo fuerte Matachín fue una de las pocas edificaciones que resistieron el embate del huracán Matthew en su paso por el oriente cubano, anunció hoy el Historiador de la Primada de Cuba.
Sin embargo, acotó, no puedo decir lo mismo del patrimonio arquitectónico, que ha tenido severas afectaciones, pues la mayoría de los techos están dañados de forma parcial o total y en las instalaciones cercanas al mar hay muchos derrumbes.
‘Baracoa no se caracteriza por poseer majestuosas edificaciones como las otras villas, pero nuestra arquitectura vernácula es parte de ese atractivo histórico y patrimonial del que nos sentimos orgullosos, sin embargo, Matthew se ensañó’, dijo el investigador.
Hartmann relató que durante el paso del huracán se encontraba fuera del municipio por cuestiones de trabajo y seguidamente expresó: ‘quedé impactado cuando regresé y vi lo que el huracán le había hecho a mi amada ciudad, todos saben cuanto amor siento por ella y verla así destruida fue un gran golpe’.
Pero en medio de su pesar dijo sentirse satisfecho por el optimismo con que los pobladores de la primera villa han asumido el reto de la reconstrucción y por las muestras de solidaridad recibidas desde otras regiones del país y del exterior.
En cuanto a los daños al patrimonio material monumentario, explicó que aún no se ha realizado una valoración completa, pero que en la medida que avancen las tareas de recuperación y se acceda a cada uno de los sitios históricos y patrimoniales del municipio, podrá informar con más detalles al respecto.
El Historiador de Baracoa precisó que el primer ciclón del que se tiene constancia escrita en los archivos de la ciudad ocurrió en 1832, a partir de esa fecha sólo cinco eventos meteorológicos de ese tipo han pasado por esta parte del extremo nororiental del archipiélago.
‘Pero ninguno tuvo la fuerza devastadora de Matthew, se lo puedo asegurar. Este huracán quedará indeleblemente marcado en la memoria de quienes habitamos esta región’, puntualizó.
