Guantánamo.- Si algo caracteriza en los clásicos nacionales al equipo de béisbol de Las Tunas, es la fortaleza de su ofensiva que lo bautiza como Los Leñadores. Sin embargo, la representación cubana en la Serie del Caribe, Panamá 2019, adolece de su arma fundamental y está al borde de no conseguir su propósito en el torneo: avanzar a la discusión del título.
Luego de un inicio triunfal con marcador de 3×1 ante el representativo de México, Charros de Jalisco, el equipo de la mayor de las Antillas encaja dos derrotas consecutivas ante Cardenales de Lara, de Venezuela, 1×0, y ayer, 3×2, ante los mexicanos, que ponen contra la pared a Los Leñadores.
En ambos derrotas influyó y determinó la pobre ofensiva cubana, que solo ha podido anotar dos carreras en esos dos pleitos que suman 20 entradas, pues ante Los Charros se jugaron 11 entradas.
Sin embargo, la ofensiva está disminuida no solo en la selección cubana sino en la mayoría de las que se desempeñan en esta versión de la serie del caribe, y los marcadores cerrados se imponen, por lo cual hay que apoyarse en variantes al bate, que los cubanos no logran concretar.
Ante la calidad de los lanzadores que se han presentado hasta el momento, sin ser de otra “Galaxia”, pero sí con buen dominio de los lanzamientos y excelente control, se impone el juego estratégico en que la velocidad en función de la ofensiva debe prevalecer.
No obstante, la dirección de Los Leñadores no encuentra respuesta ante la pobre ofensiva mostrada por los bateadores y escasean jugadas necesarias como el toque de bola para sacrificarse, el bateo y corrido, entre otras, que pudieran producir carreras.
Con el madero solamente el toletero Alfredo Despaigne, quien ha impulsado 4 de las 5 carreras que tiene el equipo, y Yordanis Samón, han logrado batear con regularidad, pero el resto permanecen silenciados, y así es imposible obtener las victorias.
Mucha polémica despertó entre aficionados y la prensa especializada cubana la nómina dada a conocer para participar en la Serie del Caribe, y sin pretender hacer leña del árbol caído, la razón parece estar en la opinión popular.
A favor de los cubanos está, nuevamente, el excelente comportamiento de los lanzadores en el torneo. Sin embargo, a pesar de tener 13 hombres en el roster se sobreutilizan los cerradores, Raidel Martínez y Liván Moinelo, y eso trae consecuencias que ya salieron a relucir en el último juego.
La realidad indica que Los Leñadores cubanos están contra la pared, y solo un milagro bien difícil, que el representativo de Venezuela ceda hoy ante México y luego ante los antillanos por amplio marcador, provocaría un triple empate y el desenlace vendría por la cantidad de carreras anotadas y permitidas entre los tres contendientes.
