Cubanos en la CAN-AM: primera mitad decepcionante

Yosvani Alarcón ha sido el mejor bateador del equipo en la gira por Canadá. Foto: Ricardo López HeviaNo se puede calificar de otra forma el desempeño de la selección cubana de béisbol en la mitad inicial de su gira de 19 partidos ante equipos de la liga Canadiense-Americana. Siete derrotas en diez salidas es un balance insatisfactorio, decepcionante, que deja abierta las puertas a interrogantes.

 Lo primero es definir cuál es la real calidad de la liga Can-Am. No tiene clasificación, es decir, no es clase A o doble A o triple. A ella acuden peloteros de muchas latitudes, especialmente latinoamericanos con experiencia en otros torneos, para enfrentar a. lanzadores de velocidad entre 90 y 95 millas que mueven la bola constantemente. Puede afirmarse que la Can-Am es una “liga de oficio” donde se juega buen béisbol.

Con esas credenciales nadie puede ir a topar con ellos pensando en salir airoso día tras día. Pero tampoco es para perder siete de diez choques. El equipo cubano ha fallado constantemente tanto en preservar las ventajas como en saber ganar un desafío cerrado, demostrando en más de una ocasión falta de lo que muchos exhiben en esa liga: oficio.

La ofensiva promedia 280 y pudiera pensarse que sí, es un buen average. Pero fabrica solo 40 carreras, de ellas 12 en el segundo partido ante los Champions de Ottawa, lo que nos deja 28 anotaciones en nueve juegos —a tres y fracción—, insuficiente si contamos con un pitcheo ineficaz en la mayoría de los casos.

Los abridores no se han comportado a la altura de lo esperado. Causa asombro ver a nuestros tres primeros en la rotación acumular promedios negativos. Freddy Asiel Álvarez anda por 6,51; Yosvani Torres 7,36 y Vladimir García 8,52, con una solitaria victoria del avileño García y tres derrotas. Lo mejor ha estado a cargo de Vladimir Baños y el zurdo Yoanni Yera, ambos exhibiendo un 1,42. Yera acumula una apertura y tres partidos de relevo, aspecto este último donde el cerrador por excelencia, Liván Moinelo, ha regalado seis bases en cinco entradas y ha aceptado cuatro limpias, muy lejos de su reconocida eficiencia.

Revisando bateador por bateador, es indudable que el receptor Yosvani Alarcón sigue demostrando calidad, líder del equipo con seis carreras impulsadas. Pero ni siquiera él —líder en cuadrangulares en la 55 Serie, con 17— pudo sacar una pelota más allá de los límites, primera ocasión en que una selección Cuba no conecta un jonrón en 346 turnos al bate, una demostración de falta de poder, algo que nos sobró no muchos años atrás.

En oportunidades como esta —cuando un plantel está metido en una racha perdedora— lo habitual es culpar a la dirección del equipo. Pero, en mi opinión, ni Roger Machado ni el más ganador de los mentores puede revertir una situación como esta cuando faltan elementos imprescindibles para ganar: control y diversidad de lanzamientos, paciencia en el home para discriminar los envíos del pitcheo rival y un accionar relajado en el terreno.

La selección inicia este martes la segunda mitad de su periplo enfrentando tres veces a los Sussex County Miners (balance de 13 y 17 en la justa), para después lidiar con el Rockland Boulders (19 y 11) entre viernes, sábado y domingo. Posteriormente chocarán con los Chacales de New Jersey, actuales líderes del torneo con 20 victorias y diez reveses antes de finalizar el sábado 2 de julio con la representación de la isla japonesa Shikoku.

Sin dudas, un duro camino por recorrer, casi sin descanso, otra de las características de esta “liga de oficio”.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *