Guantánamo.- A 16 años de su desaparición física, Vilma Espín Guillois, Heroína de la Sierra y el Llano, se alza como ejemplo de mujer de talla excepcional para Cuba y el mundo.
En verdad parece que se ha detenido el tiempo, y es que la firmeza de sus ideas y el aliento incansable, en donde también encontró fuerzas la Revolución, permanecen entre nosotros como dádiva divina.
La Ciudad Héroe fue la más acabada cuna de su grandeza, donde no solo palabras fueron cincel de su figura, sino la valentía en cada acción clandestina, y la resistencia ante las duras faldas de la Sierra Maestra.
Humilde, sencilla pero intransigente, defensora de las tradiciones históricas que antecedieron su época, donde encontró la semilla que le convertiría en mujer de talla excepcional.
Hoy en nuestras mujeres, se reconoce lo imprescindible de tu presencia en las transformaciones que hacen posible la Revolución en el poder, es gracias a ti. Hoy, como cada día, bautizas cada logro de mujer, en sus más disímiles roles, y va tu sonrisa satisfecha por lo que hoy son tan mujeres, nuestra cubanas.
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