
Guantánamo.- En el aniversario 169 de su natalicio el Apóstol Cubano José Martí vuelve a ser honrado en esta ciudad, como cada año, con la partida hacia las montañas de la Cruzada Guantánamo-Baracoa, mayor suceso teatral de acción comunitaria en Cuba y uno de los más trascendentes de Latinoamérica.
Este 28 de enero tras rendir ofrenda floral y artística al Maestro, en el parque guantanamero que lleva su nombre, se enrumbó la emblemática expedición a las serranías, al llamado de la utilidad de la virtud, ahora por las exigencias del contexto pandémico con elenco esencialmente local, sin los habituales invitados foráneos, pero con el mismo ímpetu y las mochilas cargadas de buen arte.
El actor titiritero Eldys Cuba, a cargo del programa, explicó que como de costumbre hasta inicios de marzo se ofrecerán funciones en comunidades de los municipios Manuel Tames, Yateras, San Antonio del Sur, Imías, Maisí y Baracoa, pero en coherencia con los protocolos de control epidemiológico tendrán lugar sólo en recintos con hasta un 50 por ciento de capacidad de público.

El veterano actor del Guiñol Guantánamo, una de las figuras agasajadas durante la gira por sus 30 años de carrera, puntualizó que por la misma razón se ofrecerán sólo unos 150 espectáculos diarios, casi la mitad de los usualmente programados, la mayoría serán diurnos y se desplegarán tanto en salas de TV y cine, como en cooperativas y escuelas de las lomas.
Los grupos guantanameros Guiñol, Dramático y La Barca van a la cabeza de la troupe, también con gran protagonismo se suma el proyecto de variedades circenses Carpandilla, que celebrará sus 15 años de fundado, y de otra provincia cubana sólo se incorpora al periplo una representación del capitalino grupo Para Contarte Mejor, más el narrador oral español David Acera.
El reconocido caricaturista Arístides Hernández (Ares) está a cargo esta vez de la imagen gráfica de la Cruzada, que en 2021 por el impacto de la COVID-19 sólo tuvo presencia virtual, pero ahora vuelve a sus cientos de kilómetros por el Macizo Sagua-Baracoa, al satisfactorio reencuentro con el público.
Tras 32 años de creada esta gira permanece viva y hermosa, manteniendo su objetivo de contribuir al enriquecimiento cultural en recónditos parajes, muy a tono con la estrategia de desarrollo del país, fomentando valores sociales y culturales, y la calidad espiritual y de vida de la población del lomerío, coincidieron sus protagonistas al retomar su peregrinar este 28 de enero.
Se trata de una desinteresada obra de amor al arte y al prójimo, un teatro participativo con el cual han crecido varias generaciones de las montañas, donde tanta valía tiene el actor como el público, apuntó Ury Rodríguez, el “cruzado” en activo con más ediciones vividas, quien cumple 35 años de quehacer artístico y sigue siendo el mismo aventurero juglar de aquellas iniciales travesías.
Motivados por la filantrópica experiencia, en estas décadas al periplo han respondido creadores de 16 países de América Latina y Europa, y de diversas regiones de Cuba, para acompañar a los teatristas guantanameros, que en condiciones normales en 34 días abarcan cerca de 200 localidades del Este de la Isla, mayor número de funciones gratuitas y más de 60 mil espectadores.
A propósito de ser enero un mes teatral, la Cruzada también rinde homenaje al teatro cubano, insertándose en el cronograma de la nacional Jornada Villanueva, y a su salida algunos de sus consagrados actores recibieron estímulos de las autoridades locales del Partido y el Gobierno, y de las presidencias del Consejo Provincial de las Artes Escénicas y la Sociedad Cultural José Martí.
