Poco pudo aportar el supermartes a lo ya conocido, tanto para el representante demócrata Joe Biden como para el republicano Donald Trump. La convocatoria de ayer, en 15 estados, dejó sentenciada la porfía final que debe celebrarse el 4 de noviembre de este año.
En el camino de estos siguientes ocho meses se producirá la Convención Nacional Republicana, los días entre el 15 y el 19 de julio, en Wisconsin, y la Demócrata del 19 al 22 de agosto, en Chicago, Illinois.
De acuerdo con todas las encuestas, tanto el republicano Trump como el demócrata Biden tienen aseguradas sus respectivas ventajas.
En el caso de Trump, según la encuesta de Five Thirty Eight, en el estado de California tiene una ventaja del 73 % sobre el 19 % con respecto a la rival de su propio partido, Nikki Haley. En Texas, la diferencia es de 78 % a 14 %; en Carolina del Norte, de 68 % a 23 %; en Tennessee, de 83 % a 15 %; y en Virginia, de 65 % a 17 %.
A escala nacional, la ventaja de Trump sobre Nikki Haley es de 77 % a 15 %, lo que confirma que no tendrá contrincante para llegar a las elecciones presidenciales de noviembre.
Biden tampoco tiene otro adversario de su partido para lidiar en estos shows, más mediáticos que electorales.
Según coinciden especialistas consultados por Sputnik, los demócratas, en la contienda final, tendrán como mensaje principal de su campaña el caos que significará un regreso de Trump a la presidencia.
En todo caso, insisten en que «Joe Biden puede que no sea el mejor, pero lo es en relación con un posible regreso de Trump».
No obstante, quedan muchos momentos para escaramuzas partidistas o para consolidar una u otra tendencia por los contrincantes.
Los republicanos tendrán un «minimartes» el 12 de marzo, cuando se vote en Georgia, Hawái, Misisipi y en el estado de Washington. Una semana después lo harán Arizona, Florida, Illinois, Kansas y Ohio, y después quedarán aún una veintena de estados sin votar, que lo harán el 4 de junio, aunque se supone que para esa fecha ya todo esté decidido.
En el caso de los demócratas, tendrán votación en esos mismos estados y en las mismas fechas que los republicanos, con excepción de Hawái.
En fin, el supermartes de ayer quedará como parte de un entramado electoral lo más parecido a un show mediático, al estilo de una democracia que sufre metástasis.
(Con información de Granma)
