Inauguran en Guantánamo sala de documentación con valiosas obras de Boti


Guantánamo.- La Biblioteca Provincial “Regino Eladio Boti Barreiro” de la ciudad Guantánamo, inauguró la sala homónima, que se destina al estudio y conocimiento de la vida y obra del más renombrado intelectual del patio, en fecha correspondiente a los 110 años de la única y primera edición del título Arabescos Mentales.

Registrado bajo el sello Ex Libris, que imprime la propiedad intelectual del autor, la colección sale a la luz en 1915, y se reconoce entre las más influyentes y renovadora de lírica poética de todos los tiempos en Cuba, describe Celia Pérez Gámez, especialista principal del recinto que abre sus puertas de lunes a viernes, en los horarios de 8:30 am a 4:30 pm, y los sábados de 8:00 am a 11:00 am.

“En la sala tenemos la obra poética más relevante de Boti, continúa la especialista, “como “El Mar y la Montaña”, “La torre del silencio”, “Odas de ensueños”, “Kindergarden”, además del vasto epistolario y volúmenes sobre la historia local, entre ellos el texto en sistema Braille para ciegos y débiles visuales, que se titula “Guantánamo, breves apuntes sobre los orígenes de esta ciudad”.

En la inauguración de la sala Regino Rodríguez Boti, el nieto y albacea del abogado, pintor y escritor guantanamero dona la Revista Unión, publicada en el año 2013 por la Unión de Artistas y Escritores de Cuba, la cual contiene las ilustraciones, ensayos y artículos pocos conocidos sobre poesías y recitaciones del bardo de la Villa Iris.

Por su parte el escritor José Ramón Sánchez habla de la tertulia literaria “Las voces del silencio”, un espacio consolidado que vincula la obra de otros intelectuales cubanos con Regino Eladio Boti Barreiro, quien fallece en su natal tierra (1878-1958).

A la apertura de la sala asistieron el director provincial de Cultura, Yoelvis Labañino López, líderes sindicalistas y especialistas del sector, historiadores guantanameros, además, de la Orquesta de Guitarras, distinguida en la actividad por sus acordes de ritmos autóctonos guantanameros.

Por: Liubis Balart Martínez

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