Fui Placebo en el estudio Abdala, ahora, soy una vencedora más (+ Post )

 “No es la inteligencia recibida y casual lo que da al hombre honor; sino el modo con que la usa y la salva, no hay más que un modo de perdurar y es servir” , José Martí

Por: Raisa Martin Lobo

Guantánamo.- Cuatro miembros de mi familia, participamos en el ensayo clínico en fase III del ensayo Abdala, producto cubano, desarrollo por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, el cual evalúa la eficacia, seguridad y inmunogenicidad del candidato vacunal CIGB-66 contra SARS-CoV-2.

Una vez culminado el estudio, supe que era Placebo, la única de mi núcleo familiar. Sin dudas, me alegré por el resultado de mi familia, pero en un primer momento me sentí un poco desencantada, luego comprendí que regresar para ponerme las vacunas, no significa nada comparado con quienes enfermaron o con quienes ingresaron la larga lista de número de contagios. No hay nada más sublime que la Vida.

Ser Placebo entre miles de cubanos en igualdad de condiciones, por supuesto que no fue un bálsamo, sino una esperanza a la vida, pues sirvió para saltar a otro peldaño del futuro de la Ciencia Cubana. Estoy consciente que el paso al frente que dimos miles de voluntarios cubanos, permitió que próximamente comience la vacunación masiva en mi país y en otros países donde salvara miles de vidas.

Por eso seguí como voluntaria y llegué, como otros de mis compañeros de trabajo y cubanos, hasta final de esta historia y de eso, estoy orgullosa por ayudar a la ciencia desde mi humilde posición.  Esta es una historia de alma y amor, de corazón y vida, de orgullo y desinterés, una historia donde estará escrita el destino y el futuro de nuestra nación y de la humanidad toda. 

En su muro de Facebook, La Dra.C Dagmar García Rivera, directora de investigaciones del Instituto Finlay de Vacunas, escribió: ““Cuando esta historia termine, cuando tengamos el ansiado número de la eficacia y cuando hayamos producido las dosis suficientes para alcanzar vacunar a toda la población habrá que reconocer a mucha gente, entre ellas a los voluntarios y especialmente a los placebos…

Y me honran sus palabras, Dra. Llevo en mi brazo izquierdo, la primera dosis de Abdala. Cargo una dosis de amor, altruismo y desinterés, una dosis de talento, entrega y sacrificio nuestros abnegados hombres y mujeres de Ciencia que dedicaron muchas jornadas de labor para devolver la esperanza a Cuba ante la cruel pandemia de la Covid-19 que tantas vidas ha dejado en Cuba y el resto del mundo. Ante ellos, mis respetos…

Llevo en mi brazo, además, el granito de arena que puse en esta ardua batalla donde venceremos porque Abdala es la Cuba que avanza y defiende su futuro. Al final, ahora qué importa si fui Vacuna o Placebo, estoy orgullosa de llevar por dentro la resistencia de Abdala. Estoy feliz porque confío en la Salud Pública Cuba y por haber participado en este gran salto de la ciencia cubana. Ahora,  soy una vencedora más.

1 comentario

  1. Felicidades importante trabajo periodísticos respecto a la covid un año de sacrificio pero al final todos ganamos gracias Cuba por tanto esfuerzo en sentido general.

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