
Según explicó en un documento, Ghosn trató que los pagos -ascendentes a 14,7 millones de dólares- se hicieran a una tercera persona desde junio de 2009 hasta marzo de 2012 por una filial de Nissan.
La fiscalía aseguró que tales operaciones ocasionaron pérdidas a la automotriz y constituyen un presunto delito de violación de confianza agravado.
Este cargo se suma a los dos anteriores impuestos a Ghosn y que derivaron en su arresto el pasado 19 de noviembre.
El exejecutivo fue encerrado por fraude en el reporte de su salario y el uso de dinero de la empresa para financiar viajes familiares, cenas privadas y rentas de casas de lujo en las ciudades de Río de Janeiro (Brasi), Beirut (Líbano), París (Francia) y Ámsterdam (Países Bajos), más otras actividades ilegales.
De esa manera disminuyen las posibilidades de conseguir la libertad bajo fianza que su defensa planea presentar este viernes.
Además de Ghosn, también está detenido un cercano colaborador Greg Kelly, a quien culpan de conspiración.